El director de la CIA, Bill Burns, se reunió el lunes en Ankara, Turquía, con su homólogo de la inteligencia rusa para subrayar las consecuencias si Rusia despliega un arma nuclear en Ucrania, de acuerdo con un funcionario del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
El funcionario, que no estaba autorizado a hacer comentarios públicamente y habló bajo condición de mantener el anonimato, dijo que Burns y Sergei Naryshkin, jefe de la agencia de espionaje SVR de Rusia, no hablaron sobre la resolución de la guerra en Ucrania.
Antes del encuentro, funcionarios de la Casa Blanca dijeron que Burns planeaba plantear los casos de la estrella de básquetbol del equipo Phoenix Mercury, Brittney Griner, y el ejecutivo de seguridad corporativa de Michigan, Paul Whelan, dos estadounidenses detenidos en Rusia sobre quienes el gobierno de Biden ha estado presionando para que sean liberados en un canje de prisioneros.
La reunión de Burns-Naryshkin fue el encuentro cara a cara de mayor rango entre funcionarios estadounidenses y rusos desde antes que el presidente ruso Vladimir Putin ordenara la invasión en febrero.
El funcionario indicó que las autoridades ucranianas fueron informadas antes del viaje de Burns a Turquía.
El presidente Joe Biden, después de reunirse con el presidente de China, Xi Jinping, al margen de la cumbre del Grupo de los 20 en Bali, Indonesia, dijo a periodistas que ambos discutieron la guerra de Rusia en Ucrania. Biden agregó que “reafirmaron nuestra creencia compartida de que la amenaza del uso de armas nucleares es totalmente inaceptable”.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo a la agencia de noticias estatal rusa Tass que la reunión entre Burns y Naryshkin “efectivamente tuvo lugar” y que “se trató de una iniciativa del lado estadounidense”.
En Turquía, un asesor de alto rango del presidente Recep Tayyip Erdogan confirmó que el país fue sede de la reunión entre los jefes de las agencias de inteligencia rusa y estadounidense el lunes. El director de comunicaciones, Fahrettin Altun, dijo a The Associated Press que la reunión estaba “relacionada con amenazas contra la seguridad internacional, comenzando con el uso de armas nucleares”.