Estados Unidos impuso restricciones para los titulares de pasaportes húngaros bajo su Programa de Exención de Visa (Visa Waiver) el martes, diciendo que Budapest no ha abordado las vulnerabilidades de seguridad planteadas repetidamente por Washington.
Las relaciones entre los dos gobiernos se han visto afectadas recientemente por el retraso de Budapest en la votación parlamentaria sobre la adhesión de Suecia a la OTAN y las restricciones a los derechos LGBTQ por parte del gobierno nacionalista del primer ministro Viktor Orban.
En un comunicado, la embajada de EE.UU. en Budapest dijo que el período de validez ofrecido a los húngaros bajo el Sistema Electrónico para la Autorización de Viajes (ESTA) se reducirá inmediatamente de dos años a un año, y que solo se permitirán visitas individuales bajo el sistema y no múltiples visitas.
Hungría otorgó la ciudadanía a alrededor de un millón de personas entre 2011 y 2020, en su mayoría húngaros étnicos que viven en los Estados vecinos, “sin medidas de seguridad adecuadas para verificar sus identidades”, dijo la embajada de Estados Unidos.
Las concesiones de ciudadanía fueron un movimiento político de Orban que le valió votos en las elecciones posteriores.
Un alto funcionario del gobierno de EE.UU. dijo que las modificaciones no se aplicaron a ninguno de los otros 39 participantes en el Programa de Exención de Visa y que eran “exclusivas de Hungría”.
“Hay un problema sistémico, que consiste en que se emitieron cientos de miles de pasaportes entre 2011 y 2020 sin requisitos de verificación de identidad”, dijo el funcionario.
Cuando se le preguntó si la medida estaba relacionada con otros temas que causaron fricciones entre los dos gobiernos, el funcionario dijo: “Estados Unidos está prestando mucha atención a las elecciones de Hungría”, y agregó, sin embargo, que la medida no debe interpretarse como un mensaje sobre otros asuntos.
El funcionario indicó que las vulnerabilidades de seguridad en Hungría se identificaron mucho antes de la invasión rusa de Ucrania.
Las restricciones se implementaron un día después de que el partido gobernante Fidesz de Orban boicoteó una sesión del Parlamento convocada por los partidos de la oposición para votar sobre la candidatura de Suecia a la OTAN. La votación no se llevó a cabo al final.
Suecia solicitó el año pasado unirse a la OTAN después de la invasión rusa de Ucrania, pero las objeciones de Turquía y Hungría han retrasado su postulación.
En 2014, Estados Unidos prohibió la entrada de seis húngaros a Estados Unidos como advertencia al gobierno anterior de Orban para que revirtiera las políticas que amenazaban con socavar los valores democráticos.