En una medida que se materializará apenas unos días antes de la asunción de Joe Biden en la Casa Blanca, el Presidente Donald Trump anunció oficialmente esta semana el retiro de tropas de EE.UU. en Afganistán hasta dejarlas en 2.500 efectivos el 15 de enero de 2021, y un número similar en Irak.
Con esto, Washington renunciaría a una posición geopolítica estratégica que ha combatido por la diplomacia y por las armas desde 1990, que ha costado en las últimas tres décadas miles de vidas de militares estadounidenses.
Pero desde hace algunos años que el propio Pentágono viene advirtiendo de la pérdida de “superioridad militar” de EE.UU. frente a Rusia o China. Así quedó de manifiesto en un informe sobre la estrategia de defensa del gobierno de Trump que el Congreso encargó a un panel de expertos.
El reporte de 2018 advirtió que “la superioridad militar de EE.UU. se ha erosionado hasta un nivel peligroso” y que la seguridad y el bienestar del país “se enfrentan a su mayor riesgo en décadas”.