Washington y sus aliados tienen previsto condenar el lunes, al unísono, las ciberactividades “maliciosas” de Pekín y acusarán al gobierno chino de llevar a cabo operaciones de extorsión contra sus empresas, pero también de amenazar su seguridad, según un alto funcionario estadounidense.
“Un grupo inédito de aliados y socios, incluyendo la Unión Europea, Reino Unido, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, la OTAN se unirán a Estados Unidos para exponer las actividades cibernéticas maliciosas del ministerio de Seguridad chino”, declaró a la prensa bajo condición de anonimato.
Las actividades cibernéticas de China representan “una grave amenaza para la economía y la seguridad nacional” de Estados Unidos y sus aliados, apuntó.
El lunes, dijo, “un grupo inédito de aliados y socios, incluyendo la Unión Europea, Reino Unido, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, la OTAN se unirán a Estados Unidos para exponer las actividades cibernéticas maliciosas del Ministerio de Seguridad chino”.
Acusarán al gobierno chino especialmente de “recurrir a piratas informáticos criminales” para realizar ataques en el mundo entero, a veces “por lucro personal”, y detallarán “50 de sus tácticas, técnicas y procedimientos”, precisó.
Esos ataques pueden tener como objetivo el robo de datos o tecnología, pero “reportes también imputan a hackers ligados al gobierno chino pedidos de rescate por millones de dólares dirigidos a empresas privadas”, añadió, sin dar detalles.
Los ataques de “ransomware” o programa de chantaje, que implican bloquear los datos de los servidores de las víctimas y luego exigir dinero para restablecer el acceso, son cada vez más frecuentes y grandes empresas estadounidenses han sido víctimas de ellos recientemente, aunque sobretodo por parte de piratas ligados a Rusia.
En su declaración, Estados Unidos y sus aliados acusarán formalmente a China por el ataque masivo en marzo contra los servicios de mensajería Exchange del grupo Microsoft, que habría afectado a al menos 30.000 organizaciones, incluyendo empresas, municipalidades e instituciones locales en Estados Unidos.
El gigante de la tecnología ya había acusado a un grupo de hackers ligados a Pekín llamado “Hafnium”.
China y Rusia
El funcionario dijo también que Washington y sus aliados intercambian consejos técnicos para enfrentar a China en el ciberespacio y no excluyen “otras acciones para hacerla enfrentar sus responsabilidades”.
Según él, “una acción única no será suficiente para cambiar la actitud de China en el ciberespacio, y un país actuando solo, tampoco”.
“Estamos presentando un enfoque cibernético común con nuestros aliados, y estableciendo expectativas claras sobre cómo se comportan las naciones responsables en el ciberespacio”, concluyó.
Las últimas acusaciones de ciberataques a Estados Unidos se han dirigido a Rusia y no a China.
Washington ofreció la semana pasada recompensas de hasta 10 millones de dólares por información sobre la identidad de piratas informáticos extranjeros con la esperanza de detener los ataques de ransomware.
Los expertos estadounidenses creen que muchos de ellos se originaron en Rusia, aunque el grado de participación del Gobierno es objeto de debate.
Moscú niega cualquier responsabilidad.