El gobierno del presidente Donald Trump informó este sábado que todas las sanciones de Naciones Unidas contra Irán han sido restablecidas, una medida que la mayoría del resto del mundo considera ilegal y monta el escenario para una confrontación potencialmente desagradable durante la Asamblea General anual del organismo mundial.
Washington anunció que su activación del mecanismo “de reimposición” para la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que consagró el acuerdo nuclear de Irán de 2015 había entrado en vigor a las 8:00 de la noche hora de este de Estados Unidos. Ocurre 30 días después que el secretario de Estado norteamericano Mike Pompeo notificó al Consejo que Irán se encontraba en “incumplimiento considerable” de sus obligaciones bajo el acuerdo, conocido como el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA, por sus siglas en inglés).
“Estados Unidos tomó esta decidida medida porque, además del incumplimiento de Irán de sus obligaciones del JCPOA, el Consejo de Seguridad no ha extendido el embargo de armamento de Naciones Unidas a Irán, que había estado en vigencia durante 13 años”, aseveró Pompeo en un comunicado emitido precisamente a las 8:00 de la noche.
“De conformidad con nuestros derechos... iniciamos el proceso de reimposición para restablecer prácticamente todas las sanciones de la ONU previamente rescindidas, incluyendo el embargo de armamento”, dijo. “El mundo será más seguro como resultado”.
La Casa Blanca planea emitir una orden ejecutiva el lunes que detalle la manera en que Estados Unidos impondrá las sanciones restablecidas, y se prevé que los Departamentos de Estado y del Tesoro expliquen cómo serían sancionados los individuos o negocios extranjeros por no espetar las sanciones.
“Estados Unidos espera que todos los Estados miembro de Naciones Unidas cumplan plenamente con sus obligaciones de implementar estas medidas”, afirmó Pompeo. “Si los Estados miembro de Naciones Unidas no cumplen plenamente con sus obligaciones de implementar tales sanciones, Estados Unidos está preparado para hacer uso de sus autoridades nacionales para imponer consecuencias por eso incumplimientos y asegurarse de que Irán no coseche los beneficios de actividad prohibida por Naciones Unidas”.
Sin embargo, la decisión de Estados Unidos enfrenta una férrea oposición de otros integrantes del Consejo de Seguridad que han asegurado que la ignorarán. Señalan que Estados Unidos perdió la posición legal para apelar a una reimposición al momento en que el presidente Donald Trump se retiró del acuerdo nuclear en 2018 y restableció las sanciones estadounidenses a Irán. Estados Unidos argumenta que mantiene el derecho a hacerlo siendo un participante original del acuerdo y miembro del Consejo.