Israel anunció el miércoles sus peores pérdidas en combate en más de un mes después de una emboscada en las ruinas de Gaza, mientras enfrenta un creciente aislamiento diplomático a medida que aumentan las muertes de civiles y empeora la catástrofe humanitaria en el enclave palestino.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que el Ejército seguiría luchando a pesar de la presión internacional para un alto el fuego. “Continuaremos hasta el final, hasta la victoria, hasta que Hamas sea aniquilado”, dijo a los soldados en Gaza por radio. “Digo esto ante el gran dolor, pero también ante las presiones internacionales. Nada nos detendrá”.
Las declaraciones de Netanyahu coincidieron con el reporte de que 10 de sus soldados murieron en las últimas 24 horas, incluido un coronel al mando de una base avanzada y un teniente coronel a cargo de un regimiento. Fue la peor pérdida en un día desde que 15 soldados murieron el 31 de octubre, según Reuters.
La mayoría de las muertes se produjeron en el distrito Shejaiya de la Ciudad de Gaza, en el norte, donde las tropas fueron emboscadas cuando intentaban rescatar a otro grupo de soldados que había atacado a los combatientes de Hamas en un edificio, dijo el Ejército.
El teniente coronel Tomer Greenberg, comandante de la Brigada Golani, que había luchado contra Hamas durante su ataque a las comunidades fronterizas del sur de Israel el 7 de octubre, murió durante un intento fallido de rescatar a cuatro soldados heridos.
Greenberg y varios de sus oficiales superiores perdieron la vida en combates con artefactos explosivos improvisados mientras eran atacados desde edificios. Entre los muertos, anunciados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) el miércoles, se encontraban otro coronel, tres mayores y varios miembros de una fuerza de combate de rescate, detalló The Guardian.
Un aviso en hebreo publicado por la Brigada Golani describía la emboscada que tuvo lugar cerca del mercado de Shejaiya. “Mientras se realizaban registros para despejar edificios en el corazón de la casbah Shejaiya, considerada una zona abarrotada y repleta de objetivos terroristas, se produjo una gran explosión en uno de los edificios y varios soldados del 13º batallón resultaron heridos”, dijo.
Refiriéndose a los soldados asesinados el martes, el ministro israelí Benny Gantz comentó que Israel estaba pagando “un precio pesado, doloroso y difícil”. Un oficial militar israelí afirmó que Israel había pagado “un precio muy alto” en el incidente.
Hamas dijo que el episodio demostraba que las fuerzas israelíes nunca podrían someter a Gaza: “Cuanto más tiempo permanezcan allí, mayor será la factura de sus muertes y pérdidas, y saldrán de allí con la cola de la decepción y la pérdida, si Dios quiere”.
Brecha entre reportes
El fin de semana el diario israelí Haaretz reveló la gran brecha entre el número de soldados heridos informado por el Ejército israelí y los registros hospitalarios, que mostraron que el número de soldados heridos es mucho mayor.
El periódico detalló: “Según los datos del Ministerio de Salud, 10.548 soldados y civiles heridos en la guerra fueron ingresados entre el 7 de octubre y el 10 de diciembre. De ellos, 131 en el hospital, 471 fueron ingresados en estado grave o crítico, mientras que 868 estaban catalogados en condición moderada”.
Haaretz señaló que el Ejército publicó el domingo pasado el número de soldados heridos, por primera vez desde el ataque de Hamas, afirmando que 1.593 soldados israelíes han resultado heridos durante este período.
“Los militares señalaron que 255 soldados habían sufrido heridas graves, 446 heridas moderadas y 892 heridas leves. El Ejército publicó la información sobre el número de soldados heridos y su condición después de que Haaretz informara hace dos semanas que se había negado a hacerlo”, informó el periódico.
Asimismo, el Ejército israelí dijo el domingo que 425 soldados han muerto desde el inicio del conflicto de Gaza el 7 de octubre. Una declaración militar detalló que entre las muertes se encontraban 97 soldados, que fallecieron desde que Israel amplió su ofensiva terrestre en el asediado enclave palestino el 27 de octubre.
Según el comunicado, otros 1.593 soldados también resultaron heridos, incluidos 559 efectivos, que fueron heridos en la operación terrestre en Gaza.
La declaración militar fue publicada un día después de que el periódico Yedioth Ahronoth informara el sábado que más de 5.000 soldados han resultado heridos en Gaza desde que comenzó el conflicto, y más de 2.000 han sido reconocidos oficialmente como discapacitados por el Ministerio de Defensa, añadiendo que más del 58% de los heridos sufrieron daños graves en manos y pies, lo que requirió amputaciones.
“Nunca habíamos vivido algo similar. Más del 58% de los heridos que recibimos tienen lesiones graves en manos y pies, incluidas amputaciones”, dijo al periódico Limor Luria, subdirectora general y jefa del Departamento de Rehabilitación del Ministerio de Defensa de Israel.
“Aproximadamente el 12% de las lesiones son internas y consisten en daños al bazo, los riñones y rotura de órganos internos”, detalló Luria. “Aproximadamente el 7% sufre problemas psicológicos, una cifra que sabemos aumentará considerablemente”, agregó.
El miércoles pasado, la emisora pública israelí KAN News informó que cientos de soldados israelíes sufrieron lesiones oculares graves y algunos perdieron la visión en uno o ambos ojos. El informe de KAN añade que al menos 40 soldados han sido hospitalizados en el Centro Médico Soroka de Bersheeba desde el 7 de octubre con graves lesiones oculares.
En tanto, el diario The Times of Israel informó este martes que, de los 105 soldados israelíes muertos hasta la fecha en la Franja de Gaza durante la ofensiva terrestre de Israel contra Hamas, que comenzó a finales de octubre, 20 fallecieron por el llamado fuego amigo y otros accidentes, según nuevos datos publicados por las FDI.
Trece de los soldados murieron por fuego amigo debido a una identificación errónea en ataques aéreos, bombardeos de tanques y disparos. Un soldado perdió la vida por disparos que no estaban destinados a alcanzarlo y otros dos fallecieron por disparos fallidos accidentales. Dos efectivos perecieron en incidentes en los que vehículos blindados atropellaron a tropas. Y dos soldados murieron por metralla, incluso por explosivos lanzados por las fuerzas israelíes.
Las FDI han evaluado que innumerables razones han llevado a los accidentes mortales, incluido el gran número de fuerzas que operan en Gaza, problemas de comunicación entre las fuerzas y el cansancio de los soldados y no prestar atención a las regulaciones, indicó el periódico.