Las fuerzas de Rusia consiguieron algunos avances en el campo de batalla el miércoles mientras tratan de volver a ganar impulso casi un año después de que lanzaron la invasión. Por su parte, Ucrania señaló que necesita unos meses más para poder organizar su propia ofensiva.

El Ministerio de Defensa de Rusia informó que sus soldados se abrieron paso por dos líneas de defensa ucranianas en la región de Luhansk, en el este del país, y que hicieron retroceder a los soldados ucranianos unos tres kilómetros, obligándolos a dejar atrás equipo y cadáveres.

La artillería, los drones y los misiles rusos llevan meses atacando sin descanso las zonas controladas por Ucrania en el este de la nación, impactando de manera indiscriminada objetivos civiles y causando destrucción, aunque la guerra se ralentizó en gran medida hasta llegar a un estancamiento en el invierno. Moscú está ávido de obtener algún avance tras meses de sufrir reveses.

En tanto, el ministro de Defensa ucraniano, Oleksiy Reznikov, dijo que las fuerzas de su país necesitan “unos cuantos meses” para aprender a utilizar las nuevas armas enviadas por los países de Occidente antes de intentar expulsar a los rusos de Ucrania.

Las provincias de Donetsk y Luhansk, que conforman la región industrial del Donbás, que es la zona limítrofe con Rusia, siguen siendo las zonas más afectadas por los ataques rusos, en momentos en los que se reporta que Moscú ha desplegado más soldados a la zona.

En Luhansk, la cantidad de ataques aéreos y terrestres por parte de Rusia “crece cada día”, comentó el gobernador Serhii Haidai a la televisora ucraniana.

“Los rusos pudieron llevar nuevas fuerzas para la ofensiva y ahora están intentando abrumarnos con una gran masa humana”, señaló Haidai.

El gobernador de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, dijo este miércoles que, la víspera, una localidad había estado bajo un ataque “ininterrumpido” de cohetes durante tres horas que causó daños en por lo menos 12 edificios.

Por lo menos 12 civiles resultaron heridos cuando las fuerzas rusas impactaron un edificio de apartamentos de cinco pisos en la ciudad de Pokrovsk, dijo Kyrylenko. Otras dos personas seguían bajo los escombros.

Entretanto, la administración militar de Kiev informó que se detectaron seis presuntos globos de reconocimiento flotando sobre la capital. Los sistemas de defensa antiaérea ucranianos derribaron a “la mayoría” de ellos, según un comunicado en línea, en el que se añadía que los globos “podrían llevar reflectores angulares y cierto equipo de reconocimiento” y estaban diseñados para “identificar y mermar” las defensas antiaéreas de Ucrania.

El comunicado prometía más detalles sobre los objetos tras “un estudio y análisis detallados”.

A medida que se acerca el primer aniversario de la guerra, y una mejora en el clima tras la llegada de la primavera, funcionarios y analistas de Occidente señalaron que los combates podrían estar llegando a una fase crítica cuando ambas partes busquen lanzar ofensivas.