El arzobispo italiano Carlo Maria Viganò, un feroz crítico ultraconservador del Papa Francisco, ha sido declarado culpable de cisma y excomulgado, dijo el viernes la oficina doctrinal del Vaticano.
Viganò, enviado papal en Washington de 2011 a 2016, pasó a la clandestinidad en 2018 después de alegar que el Papa sabía durante años sobre la conducta sexual inapropiada del cardenal estadounidense Theodore McCarrick y no hizo nada al respecto.
Dijo que el Papa debería dimitir y posteriormente lo calificó de “falso profeta” y “siervo de Satanás”.
El Vaticano rechazó la acusación de encubrimiento de conducta sexual inapropiada y el mes pasado citó a Viganò para responder a las acusaciones de cisma y de negar la legitimidad del Papa.
En un comunicado el viernes, la oficina doctrinal dijo que su negativa a reconocer y someterse al Papa Francisco quedó clara en sus declaraciones públicas.
“Al concluir el proceso penal, Monseñor Carlo Maria Viganò fue declarado culpable del delito reservado (violación de la ley) de cisma”, dice el comunicado, añadiendo que había sido excomulgado o desterrado de la Iglesia.
El arzobispo fue informado de la decisión el viernes, dijo el dicasterio vaticano. Su declaración no menciona al Papa, pero es muy poco probable que el castigo haya sido impuesto sin la aprobación de Francisco.
Viganò, que se comunica principalmente a través de la red social X, no reaccionó de inmediato. La semana pasada afirmó que se había negado a participar en el procedimiento disciplinario porque no aceptaba la legitimidad de las instituciones que lo respaldaban.
“No reconozco la autoridad del tribunal que pretende juzgarme, ni la de su prefecto, ni la de quien lo nombró”, dijo, refiriéndose al jefe de la oficina doctrinal, el cardenal Víctor Manuel Fernández, y a Francisco.
En un extenso texto, Viganò se refirió al Papa sólo por su apellido, “Bergoglio”, y lo acusó de representar una Iglesia “inclusiva, inmigracionista, ecosostenible y amigable con los homosexuales” que se había desviado de su verdadero mensaje.
Francisco ha enojado a muchos conservadores al hacer propuestas hacia los divorciados y la comunidad LGBT, y al decir que la misericordia y el perdón deben anteponerse a la estricta aplicación de la doctrina católica.
El Papa también se ha enfrentado a los conservadores y tradicionalistas al defender los derechos de los inmigrantes y la lucha contra el cambio climático, y condenar los excesos del capitalismo.
El año pasado, Francisco tomó medidas contra otro crítico archiconservador de Estados Unidos, destituyendo al obispo Joseph E. Strickland de Tyler, Texas, después de que se negó a renunciar voluntariamente tras una investigación del Vaticano.