El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos pidió el martes a todas las personas con influencia en Oriente Medio o en otros lugares que traten de evitar una nueva escalada de las hostilidades entre Israel y Hezbolá, expresando su alarma por la brusca escalada.

El ejército israelí dijo el martes que había atacado decenas de objetivos de Hezbolá en el sur del Líbano durante la noche, un día después de lanzar una oleada de ataques aéreos contra las instalaciones del grupo respaldado por Irán en el día más mortífero en décadas en el Líbano.

Casi 500 personas han muerto y decenas de miles han huido de zonas del sur del Líbano.

“El alto comisionado Volker Türk hace un llamamiento a todos los Estados y actores con influencia en la región y más allá de ella a que eviten una nueva escalada y hagan todo lo posible para garantizar el pleno respeto del derecho internacional”, dijo Ravina Shamdasani, portavoz de Türk, en una rueda de prensa en Ginebra.

“Los métodos y medios de guerra que se están utilizando suscitan serias dudas sobre su conformidad con el derecho internacional humanitario”, añadió.

Preguntada por las informaciones según las cuales Israel había advertido a la población a través de mensajes telefónicos antes de los ataques, respondió: “Que hayas enviado una advertencia diciendo a los civiles que huyan, no hace que esté bien atacar luego esas zonas, sabiendo perfectamente que el impacto sobre los civiles será enorme...”.

En la misma rueda de prensa, Abdinasir Abubakar, uno de los responsables de la OMS en Líbano, afirmó que algunos hospitales libaneses estaban “desbordados” por los miles de heridos que llegaban, muchos de ellos con heridas en los ojos y la cara. Añadió que cuatro trabajadores sanitarios habían muerto el lunes.

“Tenemos algunas pruebas y documentación que demuestran que ocurrieron al menos algunos ataques contra instalaciones sanitarias, incluso también contra ambulancias”, dijo en la sesión informativa, condenando el impacto sobre el frágil sector sanitario libanés.

El portavoz de la agencia de la ONU para los refugiados, Matthew Saltmarsh, dijo que se espera que más personas huyan de sus hogares y que la agencia está tratando de identificar nuevos refugios para los desplazados en torno a Beirut y el valle de la Becá.

“Estamos viendo decenas de miles (de desplazados), pero esperamos que esas cifras empiecen a aumentar”, dijo. “La situación es extremadamente alarmante. Es muy caótica, y estamos haciendo lo que podemos para apoyar al Gobierno”.