l Kremlin acusó el lunes a Ucrania de perpetrar lo que calificó de “monstruoso acto terrorista” el fin de semana al atacar una panadería y un restaurante en el este de Ucrania, controlado por Rusia.
Rusia afirma que al menos 28 personas murieron en el ataque en la ciudad de Lisichansk.
“Los empleados del Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia han rescatado a diez personas. Lamentablemente, 28 personas, entre ellas un niño, han fallecido”, ha hecho saber el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso en una nota recogida por la agencia TASS.
El organismo destaca que “a pesar del riesgo de un segundo ataque los rescatistas, poniendo en peligro sus vidas, continúan despejando los escombros y buscando a superviventes”.
El ataque se produjo a las 14.20 horas (hora de Moscú) utilizando lanzaderas HIMARS, han resaltado fuentes del Comité de Investigación ruso mencionadas por TASS.
El responsable de la autoproclamada República Popular de Lugansk, la entidad prorrusa de la región, Leonid Pasechnik, fue el primero en informar de lo que describió como un ataque deliberado contra la población civil.
“Dado que nuestros enemigos no han tenido éxito en el frente se han dedicado a atacar a la población civil de Lisichansk sabiendo que es fin de semana. Los empleados del Ministerio de Situaciones de Emergencia y de la comandancia militar están trabajando en el lugar para salvar a las víctimas”, ha indicado en un mensaje en su cuenta de Telegram.
Más tarde, el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso informó de que “como consecuencia de un bombardeo de las Fuerzas Armadas Ucranianas en la ciudad de Lisichansk se ha hundido el edificio de dos pisos de una panadería”. “Los esfuerzos se concentran en la búsqueda y salvamento de personas”, dijo.
Se sabe además que la media de edad está entre los 30 y los 40 años. Además hay diez heridos, según ha informado la ministra de Sanidad de la república de Lugansk, Natalia Pashchenko. Cuatro de ellos están graves.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ha denunciado que este ataque es una “muestra” de la “naturaleza criminal” del “régimen” de Kiev, por lo que ha pedido una “condena rápida e incondicional” de esta acción.