Diecinueve miembros del crimen organizado y 10 militares -entre ellos un coronel- murieron durante los eventos que rodearon el arresto del líder del cartel mexicano de drogas Ovidio Guzmán en el estado norteño de Sinaloa, dijo el viernes el ministro de Defensa, general Luis Cresencio Sandoval.
Las fuerzas de seguridad mexicanas capturaron el jueves a Guzmán, hijo del capo encarcelado Joaquín “El Chapo” Guzmán, lo que desencadenó una ola de violencia en todo Sinaloa.
Además de los agresores fallecidos, otras 21 personas fueron arrestadas durante las operaciones, informó Sandoval. Un total de 35 efectivos castrenses resultaron también lesionados por armas de fuego, agregó. Dijo que no había informes de muertes de civiles.
Sandoval informó que durante el operativo se emplearon aeronaves artilladas debido a que los agresores usaron ametralladoras calibre 50. “Los agresores emplearon ametralladora calibre 50, por lo que se hizo necesario apoyar con fuego desde aeronaves para poder garantizar al personal militar su seguridad, al personal que intervenir en la operación, también generar seguridad a la ciudadanía, asimismo a las autoridades que puedan intervenir y principalmente buscando disuadir a los presuntos delincuentes de su intención de rescatar al detenido y seguir con las agresiones hacia el personal de las fuerzas federales”, detalló en declaraciones citadas por el diario El Universal.
Asimismo, señaló que las células criminales, de manera simultánea en Culiacán, realizaron bloqueos para evitar el traslado de Ovidio Guzmán, también realizaron disparos con armas de fuego a aeronaves de Fuerza Aérea Mexicana, así como de líneas comerciales e instalaciones del Aeropuerto Internacional Federal de Culiacán, Sinaloa.
En la misma conferencia, el Presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó que agencias de seguridad de Estados Unidos hayan intervenido o apoyado en las operaciones para capturar a Guzmán y señaló que la posible extradición del capo a ese país dependerá de los jueces.
El mandatario anunció además que el despliegue de militares en Sinaloa tras la operación, que Sandoval cifró en 3,500 efectivos, proseguirá en los próximos días para garantizar la seguridad de la población.
El aeropuerto de Culiacán, el centro de la violencia, permaneció cerrado el viernes, dijeron las autoridades.
El hijo de “El Chapo” Guzmán ahora está recluido en una prisión federal de máxima seguridad, según el gobierno. Medios locales citados por CNN reportaron que Ovidio Guzmán fue trasladado en la noche del jueves al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1, conocida como la prisión de máxima seguridad del Altiplano, ubicada en el municipio de Almoloya de Juárez, en el estado de México.
Esta fue la misma prisión de la que se fugó su padre, Joaquín “El Chapo” Guzmán, en 2015, a través de un túnel en una espectacular fuga en la que se aprovechó de un punto ciego en una celda.
Ovidio Guzmán, de 32 años y al que se señala de liderar el tráfico a Estados Unidos de las drogas sintéticas metanfetamina y fentanilo, fue capturado el jueves en una población cercana a Culiacán, capital del estado norteño Sinaloa, cuna de la mayoría de los grandes barones de la droga mexicanos.