Un avión de la aerolínea Voepass con destino al aeropuerto internacional Guarulhos de Sao Paulo se estrelló con 62 personas a bordo en la localidad de Vinhedo en Brasil.
Acorde a Flightradar24, la última señal se obtuvo a las 13.30 horas y se estimaba que llegarían al terminal cerca de las 13.50 horas, pero capotó en la localidad de Vinhedo, unos 80 kilómetros antes de aterrizar en Sao Paulo.
Las imágenes de la caída de la aeronave que transportaba 58 pasajeros y 4 tripulantes se viralizaron rápidamente. En ellas, se muestra como el vuelo cae estrepitosamente a un sector rodeado de árboles y viviendas, mientras los transeúntes atónitos graban su descenso.
Aunque se confirmaron solo cuatro muertes, la prefectura local dijo que no habían sobrevivientes entre los restos de la nave.
Tras la noticia, en Cascavel –desde donde salió el avión– TV Globo entrevistó a Adriano Assis, uno de los pasajeros que no alcanzó a abordar el vuelo.
Emocionado relató al periodista que cuando llegó al aeropuerto estaba esperando el vuelo, “pero el tablero de llegadas y salidas, y los micrófonos no indicaban nada. Tampoco había nadie en el mostrador de VoePass”.
Por lo mismo, indicó que alrededor de las 10.40 un empleado de VoePass le avisó dijo que no iba a embarcar “porque ya faltaba menos de una hora para la salida. Incluso discutí con él, pero al final fue eso lo que me salvó la vida”.
El brasileño contó que luego de enterarse por la prensa del fatal accidente fue a abrazar al funcionario que impidió que abordara.
Otros dos personas señalaron al canal local CGN que tampoco lograron subir al avión, porque se perdieron en el terminal. “Nací de nuevo”, manifestó uno de los sujetos.