En un acto celebrado en el Museo de la Memoria y la Tolerancia de Ciudad de México, Cuitláhuac García, el gobernado de Veracruz pidió perdón a las familias de los cinco jóvenes desaparecidos y asesinados en 2016.

La autoridad local pidió disculpas por la responsabilidad de tuvo la policía del lugar, el hecho que las víctimas hayan sido criminalizadas, y por el abandono que vivieron las familias afectadas de parte de las autoridades, ejemplificando el hecho que durante tres meses sus cercanos acamparon afuera de la fiscalía local en busca de explicaciones.

Las víctimas fueron identificados como José Benitez, Bernardo Benítez, José Alfredo González, Mario Arturo Orozco y Susana Tapia. Siendo esta última la menor del grupo.

El grupo volvía a su casa, tras pasar un fin de semana en la playa. Ahí fueron detenidos por agentes de seguridad, y llevados por un camino secundario y fueron entregados a una banda criminal, que los mató y quemó sus cuerpos.

Por ahora, 21 personas están detenidas - ocho policías y trece civiles - a la espera de que termine el proceso judicial.