El ejército estadounidense reportó este lunes su mayor cifra de vuelos de evacuación de Afganistán hasta el momento pero se informó que persisten los actos de violencia que han impedido que muchas de las personas que buscan salir del país logren llegar al aeropuerto, mientras el régimen Talibán dejó entrever que pronto podría dejar de cooperar con dichas labores.
En un periodo de 24 horas que concluyó la mañana de este lunes, 28 vuelos de las fuerzas armadas estadounidenses sacaron del país a 10.400 personas, informó un funcionario de la Casa Blanca. El vocero principal del Pentágono, John Kirby, dijo que el incremento en la velocidad de las evacuaciones se debió, en parte, a la coordinación con comandantes del Talibán para que los evacuados ingresaran al aeropuerto.
“Hasta ahora, y a partir de este momento, se requiere de comunicación constante y evitar conflictos con el Talibán”, declaró Kirby. “Lo que hemos visto es que esta labor de supresión de conflictos ha funcionado bien en cuanto a permitir el acceso y el flujo, así como para reducir el tamaño de las multitudes apostadas fuera del aeropuerto”.
Debido a que el acceso sigue siendo complicado, las tropas estadounidenses utilizaron otro helicóptero para ir por más ciudadanos estadounidenses. Funcionarios federales señalaron que un helicóptero militar recogió a 16 estadounidenses este lunes y los llevó al aeropuerto para su evacuación. Se trata de al menos la segunda ocasión en que se realiza una operación de rescate de este tipo fuera del aeropuerto. Kirby informó el jueves pasado que tres helicópteros del Ejército recogieron a 169 estadounidenses cerca de un hotel ubicado cerca del aeropuerto para trasladarlos directamente a la pista.
Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional del presidente Joe Biden, dijo en la Casa Blanca que continúan las negociaciones con el Talibán mientras el gobierno busca formas adicionales para el traslado seguro de estadounidenses y otras personas hacia el aeropuerto de Kabul.
“Conversamos a diario con el Talibán a través de canales políticos y de seguridad”, dijo. Añadió que será decisión de Biden continuar o no con las operaciones de evacuación después del 31 de agosto, fecha programada para el retiro de las tropas estadounidenses de Afganistán.
En una clara muestra de la urgencia por completar el proceso en medio de una amplia gama de amenazas a la seguridad, el Pentágono publicó un video de un apuntador láser dirigido a una aeronave C-17 de la Fuerza Aérea, en un aparente intento por distraer al piloto durante el aterrizaje.
Biden dijo el domingo que no descartaría ampliar la campaña de evacuación más allá del 31 de agosto, fecha que había fijado para completar la retirada de las tropas. Y el primer ministro británico, Boris Johnson, tiene previsto presionar a Biden para que prorrogue la fecha a fin de sacar al máximo número posible de extranjeros y aliados afganos. Biden se reunirá el martes con el G7 en una cumbre virtual sobre Afganistán.
El portavoz de los talibanes, Suhail Shaheen, en una entrevista con Sky News, dijo que el 31 de agosto es una “línea roja” que Estados Unidos no debe cruzar y que ampliar la presencia estadounidense “provocaría una reacción”.