El Departamento de Estado de Estados Unidos ha emitido un comunicado para mostrar su apoyo a “su aliado” Filipinas y condenar “las peligrosas acciones” de China tras el incidente ocurrido este sábado en el mar de China Meridional, cuando una patrulla de la Guardia Costera de China (CCG) disparó con cañones de agua contra un barco filipino en la última de una serie de escaramuzas territoriales.
“Estados Unidos respalda a su aliado Filipinas y condena las peligrosas acciones de la República Popular China (RPC) contra las operaciones marítimas legales de Filipinas en el mar Meridional de China el 23 de marzo que provocó lesiones a miembros del servicio filipino y daños importantes a su buque de reabastecimiento, dejándolo inmóvil”, han argumentado.
Han añadido que “las acciones de la República Popular China impiden las rotaciones normales de personal y privan a los miembros del servicio filipino en Second Thomas Shoal de las provisiones necesarias.
Este incidente marca sólo el último episodio de la repetida obstrucción por parte de la República Popular China al ejercicio de la libertad de navegación en alta mar por parte de los buques filipinos y la interrupción de las líneas de suministro a este puesto de avanzada de larga data”.
Asimismo, han denunciado que las acciones de China son “desestabilizadoras” para la zona y “muestran un claro desprecio por el derecho internacional”, ya que según la decisión legalmente vinculante de un tribunal emitida en julio de 2016, China “no tiene reclamos marítimos legales sobre las aguas alrededor” del islote que “es una característica de marea baja claramente dentro de la zona económica exclusiva de Filipinas”.
“Según lo dispuesto en la Convención sobre el Derecho del Mar de 1982, la decisión arbitral de 2016 es definitiva y legalmente vinculante para la República Popular China y Filipinas, y Estados Unidos insta a la República Popular China a acatar el fallo y desistir de su conducta peligrosa y desestabilizadora”, han agregado.
Han terminado con una muestra de apoyo a Filipinas relatando que “Estados Unidos reafirma que el Artículo IV del Tratado de Defensa Mutua entre Estados Unidos y Filipinas de 1951 se extiende a los ataques armados contra fuerzas armadas, embarcaciones públicas o aviones filipinos --incluidos los de su Guardia Costera-- en cualquier parte del mar de China Meridional”.