Estados Unidos votó el jueves en contra de una resolución del Consejo de Seguridad que iba a permitir a Palestina unirse a las Naciones Unidas como miembro de pleno derecho.
“Estados Unidos sigue opinando que el camino más rápido hacia la creación de un Estado para el pueblo palestino es a través de negociaciones directas entre Israel y la Autoridad Palestina con el apoyo de Estados Unidos y otros socios”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Vedan Patel, previo a la votación.
El representante adjunto de Estados Unidos ante la ONU, Robert Wood, defendió tras la votación que una de las razones para rechazar el texto es que “no ha habido unanimidad” en la Comisión de Admisión para elevar la propuesta al Consejo de Seguridad.
Por su parte, el representante ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, criticó que Estados Unidos esté dispuesto “hasta el final a hacer la vista gorda ante los crímenes de Israel contra los civiles en Gaza”, donde casi 34.000 personas han muerto.
“Actualmente, una mayoría absoluta de la comunidad mundial apoya la solicitud de Palestina de convertirse en miembro de pleno derecho”, resaltó, agregando que los resultados de la votación muestran el “aislamiento” de Washington y “hablan por sí solos”.
La última vez que un Estado ejerció su derecho a veto para la adhesión de nuevos miembros fue en 1976 cuando el entonces representante estadounidense ante la ONU William W. Scranton levantó la mano para rechazar la entrada de Vietnam en el organismo internacional durante el mandato del presidente Gerald Ford. Un año más tarde, Estados Unidos dio “luz verde” a la recomendación.
El consejo de 15 miembros votó sobre un proyecto de resolución que recomienda a los 193 miembros de la Asamblea General de la ONU que “el Estado de Palestina sea admitido como miembro de las Naciones Unidas”. Se trataba del segundo intento palestino de convertirse en el miembro número 194 de las Naciones Unidas.
El Presidente palestino Mahmoud Abbas entregó por primera vez la solicitud de ingreso de la Autoridad Palestina a la ONU al entonces secretario general Ban Ki-moon en 2011. Esa solicitud inicial fracasó al no contar con los votos necesarios.
Una resolución del consejo necesita al menos nueve votos a favor y ningún veto de los miembros permanentes, es decir, Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia o China para ser aprobada. Mientras que una solicitud para convertirse en miembro pleno de la ONU debe ser aprobada por el Consejo de Seguridad y luego al menos dos tercios de la Asamblea General.
“Hemos dejado claro desde hace tiempo que las acciones prematuras en Nueva York, incluso con las mejores intenciones, no lograrán la condición de Estado para el pueblo palestino”, dijo el funcionario estadounidense.
Los palestinos son actualmente un Estado observador no miembro, un reconocimiento de facto de su condición de Estado que fue otorgado por la Asamblea General de la ONU en 2012. Israel fue admitido como miembro de pleno derecho de la ONU en 1949.
La presión palestina para ser miembro pleno de la ONU se produce seis meses después de una guerra entre Israel y Hamas en Gaza que ha matado a más de 33 mil palestinos, según los reportes de las autoridades sanitarias del enclave, y mientras Israel está ampliando los asentamientos en Cisjordania.
“Las recientes escaladas hacen que sea aún más importante apoyar los esfuerzos de buena fe para encontrar una paz duradera entre Israel y un Estado palestino totalmente independiente, viable y soberano”, dijo el secretario general de la ONU, António Guterres, al Consejo de Seguridad.
“Si no se avanza hacia una solución de dos Estados sólo aumentará la volatilidad y el riesgo para cientos de millones de personas en toda la región, que seguirán viviendo bajo la constante amenaza de la violencia”, añadió.
Ziad Abu Amr, representante especial del Presidente palestino, dijo que la adopción de la resolución dará al pueblo palestino la esperanza de “una vida decente dentro de un Estado independiente”.
Afirmó que esa “esperanza se ha disipado en los últimos años debido a la intransigencia del gobierno israelí que ha rechazado esta solución pública y descaradamente, especialmente después de la guerra destructiva contra la Franja de Gaza “.
Por su parte, el embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, calificó la resolución como “desconectada de la realidad sobre el terreno” y advirtió que “sólo causará destrucción en los años venideros y perjudicará cualquier posibilidad de diálogo futuro”.
Según explicó Reuters, el Consejo de Seguridad de la ONU ha respaldado durante mucho tiempo la visión de dos Estados que vivan uno al lado del otro dentro de fronteras seguras y reconocidas. Los palestinos quieren un Estado en Cisjordania, Jerusalén oriental y la Franja de Gaza, todos territorios capturados por Israel en 1967.
Ziad Abu Amr preguntó a Estados Unidos: “¿Cómo podría esto dañar las perspectivas de paz entre palestinos e israelíes?, ¿cómo podría este reconocimiento y esta membresía dañar la paz y la seguridad internacionales?”.
“Aquellos que están tratando de perturbar y obstaculizar la adopción de tal resolución... no están ayudando a las perspectivas de paz entre palestinos e israelíes ni a las perspectivas de paz en Medio Oriente en general”, dijo al Consejo de Seguridad.
Abu Amr señaló que el propio Israel se estableció mediante una resolución de la ONU, no mediante negociaciones con los países árabes. Se refería a la Resolución 181, que pedía la división de Palestina en un Estado judío y un Estado árabe y que fue aprobada por la Asamblea General de la ONU en 1947.
El representante especial del Presidente palestino dijo que la membresía palestina plena en la ONU no era una alternativa para negociaciones políticas serias para implementar una solución de dos Estados y resolver cuestiones pendientes, y agregó: “Sin embargo, esta resolución dará esperanza al pueblo palestino de una vida decente dentro de un Estado independiente”.