El jefe saliente del Comando Central de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijo el lunes que la violencia ultranacionalista contra los palestinos en Cisjordania estaba aumentando y que los líderes políticos y religiosos locales no están actuando para detenerla.
En su discurso de retiro, después de 37 años en DFI, el mayor general Yehuda Fuchs dijo que los líderes de Israel no vieron lo que él y los comandantes locales vieron. Fuchs, que completó su período de tres años como comandante de las tropas de las FDI en Cisjordania, será reemplazado por el mayor general Avi Bluth.
“Desafortunadamente, tanto en los últimos meses como en la última semana, el crimen nacionalista ha levantado su cabeza y, bajo los auspicios de la guerra y el deseo de venganza, ha sembrado el caos y el miedo entre los residentes palestinos que no representaban ninguna amenaza”, afirmó Fuchs.
“Los líderes locales y espirituales en su mayoría no vieron la amenaza como nosotros. Los líderes están desanimados y no encuentran la fuerza para salir abiertamente y actuar de acuerdo con los valores judíos en los que están educando a sus hijos”, prosiguió, según consigna el diario The Jerusalem Post.
“Incluso si los perpetradores (de la violencia) son una minoría, aquellos que permanecen en silencio ante sus crímenes no excluyen a los perpetradores y sus acciones del público, introduciendo así críticas hacia todos”, señaló Fuchs.
“Esto no es judaísmo para mí. Al menos no el judaísmo con el que crecí en la casa de mi padre y mi madre. Este no es el camino de la Torá. Se trata de adoptar las tácticas del enemigo y caminar según sus reglas. Era mi responsabilidad actuar. Y aquí tampoco, por desgracia, siempre lo conseguí”, lamentó.
Sus comentarios hicieron eco de las palabras del comandante de la Brigada Binyamin de las FDI, el teniente coronel Eliav Elbaz, quien se retiró de su cargo en octubre, quien dijo que la violencia de los colonos “me avergüenza como judío”.
Fuchs también se dirigió al jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, que estuvo presente en la ceremonia. Al describir las recientes críticas a Halevi por parte de los políticos de la coalición, Fuchs dijo: “Estoy avergonzado y herido como comandante, pero sobre todo como ciudadano, por los salvajes ataques que usted está sufriendo”.
Halevi respondió a los comentarios de Fuchs durante su discurso. “Aprovecho esta oportunidad para darles las gracias también en nombre de la minoría, la minoría que no sabe agradecer, que no sabe apreciar, que opta frecuentemente por condenar a quienes abordan con fe las necesidades públicas. Una minoría que ha elegido inapropiadamente atacarte... Actuaste con una brújula moral estable y de acuerdo con la ley, que algunos quieren doblegar y otros quieren olvidar”, según consigna el medio NewsMax.
El discurso de Fuchs provocó reacciones de los políticos de la coalición y no fue su primera condena a la violencia de los colonos. Ha enfrentado duras críticas por parte de los colonos y sus partidarios políticos, particularmente dentro del gobierno de coalición del primer ministro Benjamin Netanyahu. El año pasado, calificó el ataque de los colonos en Huwara como “un pogromo que se produjo a través de la violación de la ley”.
Tras su discurso del lunes, el ministro israelí de Asuntos de la Diáspora, Amichai Chikli, condenó a Fuchs por pronunciar un “discurso político”. “Un discurso de despedida del Ejército no es una plataforma para discursos políticos”, afirmó Chikli.
Según explicó la agencia The Associated Press, “la violencia ha aumentado en Cisjordania desde que el ataque de Hamas del 7 de octubre desató la guerra en Gaza. Israel lleva a cabo incursiones militares casi a diario, que a menudo desatan tiroteos mortales con militantes palestinos. Los palestinos también han llevado a cabo una serie de ataques contra israelíes”.
NewsMax detalló que la violencia de los colonos, que incluye agresiones físicas, vandalismo, incendios provocados, destrucción de cultivos e intimidación, se produce en zonas con importantes tensiones entre los residentes israelíes y las comunidades palestinas y a menudo se considera un medio para afirmar el control sobre la tierra y los recursos.
De hecho, la ONG israelí Paz Ahora, que documenta la colonización de Palestina, reveló la semana pasada que Israel aprobó confiscar 12,7 kilómetros cuadrados en la Cisjordania ocupada, la mayor incautación de tierras en esa región palestina en tres décadas.
“(El primer ministro israelí, Benjamin) Netanyahu y (el ministro de Finanzas, Bezalel) Smotrich están decididos a luchar contra el mundo entero y contra los intereses del pueblo de Israel en beneficio de un puñado de colonos que reciben cientos de hectáreas como si no hubiera un conflicto político que resolver ni una guerra que poner fin”, lamentó Paz Ahora.