Brasil superó, por segundo día consecutivo, la marca de 200 muertes relacionadas con el coronavirus en un período de 24 horas. Con 204 nuevos decesos, la lista de casos fatales alcanzó a 1.736. Los contagios confirmados, en tanto, se elevaron a 28.320, un 12% más que el día anterior. Sin embargo, esta última cifra podría estar muy lejos de dar cuenta del verdadero impacto de la pandemia en ese país. Así, al menos, lo revela un estudio que asegura que los casos pueden ser hasta 15 veces más que los indicados por el gobierno del Presidente Jair Bolsonaro.

Con base en modelos matemáticos que combinan la letalidad del virus y los índices de infección según cada franja etaria, un estudio del portal Covid-19 Brasil, que reúne a científicos y estudiantes de la Universidad de Sao Paulo y la Universidad de Brasilia, entre otros centros de investigación en el país, el análisis estima que al 11 de abril había 313.288 infectados, un número más de 15 veces mayor que el oficial en esa fecha, de 20.727, entregado por el Ministerio de Salud.

Según destaca el diario O Globo, Brasil es uno de los países con menos pruebas de coronavirus en el mundo, aunque es el undécimo más afectado en número de contagios. Si se considerara el número de casos proyectados que no se denuncian, sería el segundo en el mundo, solo detrás de EE.UU. (con casi 620 mil casos), que testea a 8.866 personas por millón, mientras que Brasil realiza 296 pruebas por millón de habitantes.

“Hemos utilizado la tasa de letalidad para calcular la cantidad estimada de infectados con base en las muertes registradas. Se supone que esa cantidad es aún mayor, por lo que tenemos en cuenta de la subnotificación de muertos por Covid-19”, dijo a La Tercera Rodrigo Gaete, doctor en Ciencias de la Universidad de Sao Paulo y responsable de la investigación.

El especialista en modelado informático Domingos Alves, miembro del grupo y líder del Laboratorio de Inteligencia en Salud (LIS) de la Facultad de Medicina Ribeirão Preto, de la Universidad de Sao Paulo, coincide con Gaete. “En Brasil los datos se recopilan de la hospitalización de pacientes y, por lo tanto, no muestran los datos reales de quienes están infectando a otras personas”, comenta a este medio.

“Si las estimaciones en promedio indican que el 10% de los casos sufren hospitalizaciones, queda más o menos claro que el número de contagios es mucho mayor”, explica Alves a La Tercera. “Además de eso, el número de pruebas realizadas en la población es uno de los más bajos del mundo”, agrega el investigador. Al respecto, Gaete considera que la estimación de 313 mil contagiados puede ser “conservadora”, ya que además del bajo número de tests, éstos demoran en ser concluidos. En Sao Paulo, el estado más afectado por la pandemia, hay 30 mil exámenes que todavía no fueron concluidos, apunta.

Y Alves agrega otro dato: “Lo más aterrador es que nuestras estimaciones aún deben subestimarse, ya que muchas de las muertes reportadas por el ministerio aún no se han confirmado y, en promedio, están con un retraso en la divulgación de, al menos, una semana”.

El grupo, que ha estado corrigiendo las proyecciones sobre la enfermedad desde el comienzo de la pandemia, también proyecta estimaciones de ocupación de camas de emergencia y de las UCI en los distintos estados del país. La primera proyección detallada, para el Distrito Federal, describe tres escenarios. En general, la situación es dramática, apunta O Globo.

“El modelo con el que estamos trabajando considera que para los tres escenarios, todas las camas están disponibles al comienzo de la epidemia. Pero, según el propio Ministerio de Salud, tenemos una tasa de ocupación promedio del 75%, y estas previsiones pueden ser más dramáticas”, observa Domingos Alves.