Cientos de bolivianos afines al partido oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) están recorriendo el país y llegará en los próximos días a la capital del país, La Paz, donde el expresidente Evo Morales espera reunir a un millón de personas.
El objetivo de la marcha es trasladar apoyo y ratificar la legitimidad del presidente de Bolivia, Luis Arce, quien este sábado se ha unido a la concentración a su paso por la ciudad de Calamarca, recoge el diario La Razón.
Morales, quien se sitúa en la cabecera de la “Marcha por la Patria” busca defender a Arce ante la situación convulsa que ha vivido el país en las últimas semanas, protagonizadas por el paro nacional, apoyado por la oposición, en contra de una ley contra el blanqueo de capitales.
“Todos somos conscientes de que Bolivia necesita trabajar, necesita salir de la crisis, necesita avanzar y hay gente que no quiere que avancemos, hay gente que quiere que nos estanquemos, porque responde no solo a sus intereses personales de grupo, sino a intereses internacionales”, aseveró Arce.
Respecto a esta última afirmación, el mandatario boliviano remarcó que “nunca más” se permitirá que “intereses extranjeros” se “entrometan” en los asuntos internos de Bolivia. “El pueblo quiere gozar de su propia riqueza para sí mismo”, defendió.
Por su parte, Morales ha mostrado su apoyo a Arce, a quien ha definido como un “hermano”, y le ha instado a que no se sienta “solo”, pues “el pueblo” está con él.
“Estamos aquí firmes, apoyando a nuestro hermano Lucho presidente, David (Choquehuanca) vicepresidente, a nuestra revolución democrática y cultural porque es un programa del pueblo. La derecha y los privatizadores nunca nos van a ganar y cuando no nos ganan, golpe”, criticó Morales en alusión al golpe de Estado de 2019 con Jeanine Áñez a la cabeza.