La firma fabricante de cohetes SpaceX y su presidente ejecutivo, Elon Musk, fueron demandados el miércoles por ocho ingenieros que afirman haber sido despedidos ilegalmente por plantear sus preocupaciones sobre un supuesto acoso sexual y discriminación contra las mujeres.
Los ingenieros -cuatro mujeres y cuatro hombres- afirman que Musk ordenó su despido en 2022 tras hacer circular una carta en la que calificaron al multimillonario de “distracción y vergüenza” e instaron a los ejecutivos de la firma a desautorizar los comentarios de contenido sexual que había hecho en las redes sociales. La demanda fue presentada en un tribunal estatal de Los Ángeles.
El recurso legal dice que la conducta de Musk fomentó una “cultura omnipresentemente sexista” en SpaceX, donde las ingenieras fueron sometidas rutinariamente a acoso y comentarios sexistas y sus preocupaciones sobre la cultura del lugar de trabajo fueron ignoradas.
“Estas acciones (...) tuvieron el resultado previsible y real de ofender, causar angustia e inmiscuirse en el bienestar de las demandantes para perturbar su tranquilidad emocional en el lugar de trabajo”, dijeron los demandantes.
Carta “perturbadora”
SpaceX no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios sobre la demanda. En todo caso la cadena CNN recordó que en respuesta a la carta en 2022, la directora de operaciones de la compañía, Gwynne Shotwell, dijo que aplicaría las normas de “tolerancia cero” de SpaceX contra el acoso de los empleados, pero The New York Times reportó que los empleados fueron despedidos por hacer que otros miembros del personal se sintieran “incómodos”.
La compañía ha negado haber actuado mal, diciendo que la carta de 2022 era perturbadora y que los trabajadores fueron despedidos correctamente por violar las políticas de la empresa.
SpaceX se enfrentó previamente a quejas similares presentadas ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB, por sus siglas en inglés) por el despido de los empleados implicados en la carta. Esas quejas afirmaban que las desvinculaciones equivalían a despidos de empleados por participar en “actividades concertadas protegidas”.
Uno de los exempleados que presentó una queja ante la NLRB y es demandante en la demanda del miércoles, Tom Moline, dijo previamente a CNN que la dirección de SpaceX utilizó una filosofía de “‘el fin justifica los medios’ para hacer la vista gorda ante los continuos malos tratos, acoso y abuso denunciados por mis colegas, muchos de los cuales fueron directamente alentados e inspirados por las palabras y acciones del CEO”.
Paige Holland-Thielen, otra de las demandantes, dijo en una declaración proporcionada por sus abogados que la demanda es un intento de responsabilizar a la dirección de SpaceX y estimular cambios en las políticas del lugar de trabajo.
“Esperamos que esta demanda anime a nuestros colegas a mantenerse fuertes y a seguir luchando por un lugar de trabajo mejor”, señaló.