César Hinostroza, el exjuez peruano detenido en España a petición de las autoridades de su país donde se le acusa de liderar una trama de corrupción en la judicatura, continuará en prisión provisional hasta que se resuelva su extradición, lo que podría alargarse más de un mes.

Hinostroza fue arrestado el viernes en Madrid por la Policía española y presentado ante un tribunal de la Audiencia Nacional para prestar declaración.

Fuentes penitenciarias informaron a Efe de que el exmagistrado fue conducido a la cárcel madrileña de Soto del Real después de que el juez español José de la Mata le enviara a prisión preventiva y sin fianza tras ser arrestado en virtud de una orden de detención.

De la Mata ordenó su ingreso en prisión a petición del fiscal mientras se decide sobre su extradición a Perú por delitos análogos en España a los de pertenencia a organización criminal, tráfico de influencias y negociaciones prohibidas a funcionarios, según el auto de prisión.

Hinostroza, que fue localizado en Madrid tras pedir el jueves asilo en España, tenía prohibida la salida de su país, abandonó presuntamente Perú por la frontera con Ecuador el domingo 7 de octubre, día de las elecciones regionales y municipales, lo que provocó la dimisión del ministro peruano del Interior, Mauro Medina.

El exjuez presidió la Segunda Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de Perú y era el juez de mayor entidad de "Los cuellos blancos del puerto", como se conocía a una amplia red de tráfico de influencias, favores y prevaricación de la que también participaban políticos y empresarios, según la acusación.

Según De la Mata, los hechos imputados reflejan que el exjuez sería el líder de una organización criminal destinada a la comisión de delitos de corrupción de funcionarios en el poder judicial peruano, así como a ocuparse de realizar nombramientos y ratificaciones ilegales dentro del mismo.

A esto se une que el reclamado "tenía conocimiento pleno de la existencia del proceso penal dirigido contra él en Perú y, por tanto, de la gravedad de las imputaciones".

"Es obvio, pues, que su presencia en España no es casual, para una mera visita a su hija", como alegó en su defensa, rebate en el auto el juez, que considera que "deliberadamente se sustrajo a la justicia peruana marchándose del país y negándose a regresar allá, lo que ha motivado la orden internacional de detención librada contra él por las autoridades judiciales peruanas".

Otro motivo para acordar la prisión sin fianza es su falta de arraigo en España -"quien lo tiene es su hija" y otros familiares que viven en España hace años, dice el juez- por lo que considera que "es evidente que él se ha fugado del Perú hace escasamente unos días justamente para eludir sus responsabilidades".