El periodista, sociólogo y exministro peruano, Fernando Rospigilosi, conversó con La Tercera sobre las causas y consecuencias del segundo proceso de vacancia contra Martín Vizcarra.
¿En qué contexto se enmarcó este proceso de vacancia?
Un fiscal independiente, Germán Juárez, viene investigando la corrupción en el gobierno regional de Moquegua cuando Vizcarra era gobernador (2011-2014), en el marco de las investigaciones al “Club de la Construcción”, empresas que se repartían las licitaciones del Estado pagando sobornos a los funcionarios. El fiscal ha logrado testimonios de cuatro o cinco personas que relatan con detalles con cuánto, cómo y dónde sobornaron a Vizcarra con varios millones de soles. Dicen que Vizcarra era el que pedía los sobornos.
¿Por qué fue destituido Vizcarra?
Es la primera vez en la historia que un Presidente es señalado por la fiscalía -y la procuraduría- con varias evidencias de corrupción. Eso genera una situación particular, pues el Presidente está usando su poder para borrar pruebas, amedrentar testigos, entorpecer las investigaciones y probablemente interferir en las elecciones de abril de 2021. Ya lo hizo antes, interviniendo el sistema judicial para perseguir a sus adversarios políticos, a los que encarceló con muchas menos evidencias que las que hay contra él. El peligro es que un Presidente acorralado use indebidamente el poder para protegerse.
¿Cómo logró prosperar esta vez la moción, siendo que la anterior no fue exitosa?
La anterior fue apresurada, no hubo tiempo de procesarla políticamente, es decir, de difundir y discutir los argumentos que la sustentaban. Y no se conocían todavía los testimonios que señalan a Vizcarra como corrupto, lo que revela la importancia que tendría para él interferir en los procesos judiciales, pues es seguro que si se le procesa, iría a la cárcel como sus antecesores.
¿Cuál es el siguiente paso para Perú?
Lo reemplaza el presidente del Congreso, que gobernaría hasta el 28 de julio de 2021. Pero no es claro si Vizcarra aceptaría una decisión del Congreso.
¿Podría perjudicarlos la salida de Vizcarra?
El resultado es impredecible. No se sabe cómo sería un gobierno de Manuel Merino. Pero el hecho es que los resultados del actual gobierno son muy malos, tanto por el número de muertos por el coronavirus como por la caída de la economía, entre los peores del mundo. Mucha inestabilidad también: tres jefes de gabinete, cuatro ministros del Interior y tres de Salud solo durante los siete meses de pandemia. Y un Presidente dedicado a tiempo completo a sus problemas y no a resolver los del país.