Se la ha visto en todo momento acompañando codo a codo al líder opositor venezolano, Juan Guaidó. Pero la joven Fabiana Rosales, de 26 años, también ha comenzado a sufrir el impacto del meteórico ascenso de su esposo tras asumir como presidente encargado de Venezuela el pasado 23 de enero ante una multitud en Caracas. Esta periodista pasó de ser una comunicadora social y militante de Voluntad Popular (VP) -el partido que fundó Leopoldo López junto a Guaidó y otros políticos de la "Generación 2007"- a convertirse en una "primera drama" para los seguidores del dirigente opositor y sus propios adherentes, que no son pocos: 511 mil seguidores en Instagram.

Oriunda de un poblado del interior del estado de Mérida, donde forjó una relación cercana con la Iglesia Católica, la "Chiqui" -como la llama Guaidó- vivió en carne propia las consecuencias de la crisis, cuando su padre falleció a causa de un infarto luego de no recibir atención médica por falta de insumos y medicamentos. Hace poco más de siete años, en un encuentro de Voluntad Popular conoció a Guaidó y nunca más se separaron. En 2013, el mismo año de la muerte de Hugo Chávez y la elección de Nicolás Maduro, se casaron y cuatro años más tarde tuvieron a Miranda Eugenia, quien acaba de cumplir 1 año y 10 meses.

En conversación telefónica con La Tercera desde su casa en Santa Fe, Caracas, Rosales revela que si bien la vida le cambió desde que Guaidó decidió desafiar al chavismo, "le pido a Dios ponerme a la altura de un momento histórico en Venezuela".

¿Qué rol juegan las mujeres en el marco de la crisis que se vive en Venezuela?

El rol de la mujer en Venezuela es fundamental. Es muy duro ver la lucha de una madre contra un sistema opresor, tratando de buscar comida o medicinas para sus hijos.

Considerando el cargo que asumió su esposo, ¿se siente la "primera dama" de Venezuela?

Pasé unos días y quizás unas semanas tratando de asumirlo. Sin duda la vida cambia, quizás en la rutina, la forma de hacer las cosas y quizás lo que yo diga hoy, puede llegar a muchas personas. Le pido a Dios ponerme a la altura del momento histórico que vive Venezuela.

El chavismo cuenta con sus propias referentes, la primera dama Cilia Flores y la vicepresidenta Delcy Rodríguez. ¿Cómo ve a las mujeres del oficialismo?

Solamente puedo decir que el mensaje de odio, de venganza y de resentimiento que he escuchado de muchas personas llegó a su fin.

Usted habla de un momento histórico. ¿Cuál es su llamado para no desaprovechar la etapa que vive la oposición?

A creer en lo que está pasando, la mente es un arma muy poderosa y la fe mueve montañas.

Y en ese sentido, ¿cómo van a lidiar con las expectativas que ha levantado Guaidó y a mantener el foco?

En muy poco tiempo se han logrado grandes cosas y todos estamos convencidos que este proceso, es de compromiso, de tener paciencia y serenidad ante las circunstancias que se aproximan.

¿De qué manera observa el meteórico ascenso de Guaidó tras asumir el liderazgo de la oposición?

Juan siempre ha sido un servidor público por naturaleza. La vida lo puso en este camino porque él tiene los valores que se necesitan. Es el mismo en las calles, en la Asamblea Nacional y en casa. Esa cercanía y carisma es lo que ha sentido la gente.

¿Cuáles son los caminos de cambio que ve para Venezuela?

Estoy convencida de que la ruta planteada es la correcta. Cese de usurpación, gobierno de transición y elecciones libres.

¿Ha sufrido amenazas como figura pública en este proceso?

Nos han amenazado muchísimas veces durante muchísimo tiempo, y a veces uno no es miedo lo que siente, es impotencia o ansiedad de no poder controlarlo.

También está el fantasma de terminar como otros líderes de oposición, viviendo en el exilio o tras las rejas...

Jamás he visto a Juan dentro de mi cabeza o de mis pensamientos detenido.

Se han hecho varios llamados a la Alta Comisionada de DD.HH. de la ONU, Michelle Bachelet, para que tome cartas en la crisis de Venezuela. ¿Cuál es su mensaje para ella?

El llamado es a que Michelle Bachelet visite Venezuela y a que se de cuenta de la realidad y de lo que pasa. Que no se quede con una sola versión de los hechos y definitivamente que venga.

Se la ha visto en todo momento junto a Guaidó, a quien el Presidente Piñera invitó a Chile. ¿Lo acompañaría si se confirma ese viaje?

Me encantaría visitar Chile. Tenemos una invitación en puerta del Presidente Piñera a quien debo agradecerle por toda su colaboración y el esfuerzo que ha dado en esta lucha por la reivindicación de los derechos de los venezolanos. De permitirse que nuestra agenda sea conjunta lo acompañaré (a Guaidó). Yo feliz de visitar Chile para reencontrarme con muchos venezolanos y para conocer una tierra que le ha dado tantas oportunidades a nuestros hermanos.

¿Cómo percibió la última gira regional y el regreso a Venezuela?

Pasaron muchísimas cosas para salir de Venezuela, mucha gente colaboró en nuestra salida y entrada. Viví situaciones de alto riesgo, de muchas emociones encontradas. Sin duda puedo escribir un libro o varios capítulos de una serie de Netflix con todo lo que ocurrió.