Al menos 31 migrantes murieron este miércoles en un naufragio frente a las costas del norte de Francia, punto de salida de las travesías hacia las costas del Reino Unido, en una tragedia que ha estremecido a las autoridades de París y Londres.

“Francia no dejará que la Mancha se convierta en un cementerio”, dijo el miércoles el presidente francés Emmanuel Macron, tras anunciar la muerte de al menos 31 migrantes.

El mandatario francés pidió el “refuerzo inmediato de los medios de la agencia Frontex en las fronteras exteriores de la Unión Europea”, y una “reunión de urgencia de los ministros europeos concernidos por la cuestión migratoria”.

Por su parte, el primer ministro británico, Boris Johnson, se dijo “conmocionado, indignado y profundamente entristecido” por lo sucedido, y aseguró querer “hacer más” con Francia para frenar estas travesías ilegales del Canal de la Mancha.

“Hemos tenido problemas para convencer a algunos de nuestros socios, sobre todo los franceses, a actuar a la altura de la situación”, declaró en Sky News tras una reunión de crisis.

A pesar de la tensión entre Francia y Reino Unido por este fenómeno, los dos países se habían comprometido a reforzar su cooperación, tras la llegada el 11 de noviembre de 1.185 migrantes a las costas inglesas, un récord.

El balance del naufragio del miércoles supera por sí solo la cifra total de fallecidos en el canal de la Mancha desde 2018, cuando comenzó a aumentar el número de migrantes que intentan alcanzar las costas británicas a bordo de pequeñas y precarias embarcaciones, ante la mayor vigilancia en los puertos y en el túnel que une Francia e Inglaterra.

Antes de este naufragio, el balance de 2021 era de tres muertos y cuatro desaparecidos. En 2020, seis personas perdieron la vida y otras tres desaparecieron. En 2019, se registraron cuatro muertos.

“Las personas mueren en la Mancha, que se está convirtiendo en un cementerio a cielo abierto, como el Mediterráneo”, dijo Pierre Roques, coordinador de una asociación de migrantes en Calais.

Cuatro detenidos

Los navíos de rescate con los cuerpos de las víctimas tenían que llegar por la noche a Calais, donde se instaló un hangar para colocarlos. En esta localidad del norte de Francia se desplegó un amplio perímetro de seguridad, con un importante dispositivo de bomberos y socorristas.

Según la prefectura marítima local, tres helicópteros y tres barcos participaban en las labores de búsqueda. Y la fiscalía de Dunkerque (norte) la apertura de una investigación.

Según las primeras informaciones de los equipos de rescate, el drama se produjo en una pequeña y endeble embarcación hinchable, con poca estabilidad en cuanto está cargada y hay oleaje.

El primer ministro francés, Jean Castex, lamentó en Twitter esta “tragedia”. “Mis pensamientos están con los numerosos desaparecidos y heridos, víctimas de (...) criminales que se aprovechan de su angustia y miseria”, agregó.

El jueves a primera hora, Castex dirigirá una reunión interministerial para abordar la situación.

El ministro francés de Interior, Gérald Darmanin, que también expresó su “fuerte emoción” y subrayó la “naturaleza criminal” de aquellos que “organizan estas travesías”, anunció que cuatro traficantes “directamente relacionados” con la tragedia habían sido detenidos. El secretario de Estado explicó además que se cree que en el bote habían 34 personas, de las cuales se encontraron 31 fallecidos, dos sobrevivientes y una desaparecida aún, sin saber las nacionalidades de ninguna de las víctimas.

El responsable de la prefectura marítima de la Mancha y el Mar del Norte, Philippe Dutrieux, había advertido el viernes que estas travesías de migrantes a bordo de pequeñas embarcaciones se duplicaron en los últimos tres meses.

Hasta el 20 de noviembre, 31.500 migrantes zarparon de las costas francesas desde enero y 7.800 fueron rescatados, afirmó Dutrieux, quien apuntó que la tendencia no se redujo pese a la bajada de temperaturas.

El Reino Unido, que acusó meses atrás a Francia de no hacer lo suficiente para detener la llegada de migrantes a sus costas, asegurá que 22.000 lograron cruzar el Canal de la Mancha en los 10 primeros meses del año.