Se había anunciado que sería una elección estrecha. Tras 12 horas de votación, la segunda vuelta presidencial de este domingo en Perú entre la candidata derechista Keiko Fujimori y su rival de izquierda, Pedro Castillo, tenía un final de infarto.
En una muestra de que esta elección era la más polarizada en décadas en el país, un sondeo a boca de urna de la firma Ipsos divulgado al cierre de los centros electorales (19.00) situó a la abanderada de Fuerza Popular a la cabeza del balotaje con el 50,3% de los votos, frente al 49,7% del postulante de Perú Libre.
“Tenemos un empate estadístico, dentro del margen de error, un empate muy ajustado. No hay manera de declarar un ganador en este momento”, comentó el director de Ipsos Perú, Alfredo Torres, al canal América, recordando el margen de error era de tres puntos porcentuales. “Tenemos que esperar al conteo rápido para saber el desenlace de esta noche”, agregó.
“Nunca una segunda vuelta fue tan claramente dividida como la presente elección”, dijo en su cuenta de Twitter el analista político y exjefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Fernando Tuesta. Por ello, pidió esperar el conteo rápido, “en el que Ipsos ha tenido una aproximación muy alta el último siglo”.
Y el conteo rápido de los votos al 100% de Ipsos revirtió los resultados. Según esta medición, Castillo obtuvo un 50,2%, mientras que Fujimori un 49,8%. “El empate continúa y están dentro del margen de error (de un punto porcentual)”, dijo Torres. “Si la diferencia del conteo rápido es de 2%, me animaría a decir que así va a quedar”, había dicho poco antes Tuesta. Con todo, reconoció que este conteo colocaba al candidato izquierdista “en la más alta probabilidad de triunfo”.
El boca de urna de Ipsos había causado desazón entre partidarios de Castillo en su región natal, Cajamarca. “Le pido a nuestros personeros y personeras estar atentos a defender cada voto. Convoco al pueblo peruano de todos los rincones del país a asistir en paz a las calles para estar vigilantes en la defensa de la democracia”, escribió el candidato izquierdista en Twitter.
Más tarde Perú Libre, a través de un comunicado, calificó de “engañoso” el conteo rápido de Ipsos y pidió “el escaneo de las actas para comprobar una por una, el conteo de votos que realizarán y revisarán los personeros de ambos partidos políticos”.
La candidata a la primera vicepresidencia por Perú Libre, Dina Boluarte, llamó a la ciudadanía “a estar atentos y vigilantes” para que se respete la voluntad popular expresada en la segunda vuelta electoral.
En declaraciones a la prensa, por su parte, Fujimori invocó a la ciudadanía a tener prudencia ante el estrecho resultado que arrojó el boca de urna de Ipsos, al tiempo que pidió a los personeros de su agrupación política a defender el voto hasta el final. “El mapa del resultado a boca de urna muestra dos grandes bloques con ciudadanos que quieren un cambio, pero con una visión diferente de país. Ese cambio lo tiene que buscar gane quien gane. Aquí lo que se tiene buscar finamente es la unidad de todos los peruanos”, aseguró la candidata de Fuerza Popular.
Y agregó: “Al ver que el margen es tan pequeño, es fundamental también mantener la prudencia. Y eso lo digo para todos los peruanos. Esta campaña ya culminó y será fundamental, como lo dije en la mañana, tender los puentes y encontrar los espacios de diálogos entre todos los grupos políticos”. “Por esa prudencia es que nosotros vamos a esperar los resultados oficiales de la ONPE”, expresó.
Según analistas electorales, ante la reñida elección entre Fujimori y Castillo, el voto en el extranjero podría ser decisivo en el conteo final. EE.UU., España, Argentina y Chile concentran el 70% de los electores peruanos en el exterior, donde históricamente han ganado los candidatos conservadores o de derecha. “Allá hay un potencial importante y podría inclinar la balanza”, dijo Manuel Saavedra, director de la Compañía Peruana de Investigación de Mercados y Opinión Pública (CPI).
Sin embargo, Tuesta aseguró que en los estudios “ya está incluido el voto en el exterior, la esperanza de Keiko Fujimori”. En cambio, indicó el analista, “el voto rural de fondo aún se puede manifestar. Un antecedente: la encuesta de Ipsos de primera vuelta del sábado 10 de abril, la boca de urna e incluso el siempre preciso conteo rápido, estuvieron por debajo de lo conseguido por Pedro Castillo”. “Además, debe haber un voto escondido por Perú Libre sobre todo en Lima”, destacó.
Con todo, el politólogo Carlos Meléndez consideró en diálogo con RPP que “no queda más que esperar el conteo de la ONPE al 100%” para saber quién es realmente el ganador de la contienda electoral. “Estamos todavía en incertidumbre”, opinó.
“Las condiciones para unas elecciones razonables, transparentes y limpias están servidas. Lo que hay que tener es la paciencia suficiente, la serenidad de ánimo para esperar los cómputos”, expresó el presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), Jorge Salas Arenas, en entrevista con TV Perú.
A las 23.30, la ONPE entregó el primer avance de resultados (con el 42% de las actas procesadas) que daba una ligera ventaja a Fujimori, pero el organismo precisó que no era una muestra estadística representativa. “Son, fundamentalmente, los resultados en los locales más cercanos a nuestros 104 centros de cómputo”, señaló el jefe de esa institución, Piero Corvetto. Sin embargo, un avance posterior, al 92,76% de las actas procesadas, aún mostraba a la candidata derechista a la cabeza, con 8.319.012 votos (50,10%), mientras que Castillo obtenía 8.287.923 sufragios (49,90%). Es decir, una diferencia de 31.089 votos. En tanto, la participación en el balotaje alcanzaba al 76,62%.
Tras conocerse los primeros resultados de la ONPE, Castillo instó a los ciudadanos a la “tranquilidad” y la “unidad”, debido a que faltaba contabilizar los votos de las regiones. “Estamos seguros que se va a respetar la voluntad popular”, remarcó.
Si gana Castillo, deberá “mostrar un liderazgo independiente” de los líderes de su partido y “consolidar una mayoría parlamentaria que le permita llevar a cabo su ambicioso programa”, dijo a France Presse la politóloga Jessica Smith. Y si vence Fujimori, “no es tarea fácil, dadas las desconfianzas que su nombre y el de su familia genera en amplios sectores. Deberá rápidamente tranquilizar los mercados, y generar medidas que permitan la reactivación”, añadió. Pero Smith recordó que el resultado es tan ajustado que “no lo vamos a saber hasta el último voto”.