“Estamos dejando atrás nuestro invierno más mortal y dando la bienvenida a la primavera de la esperanza. La pandemia aún no ha pasado del todo y debemos continuar avanzando con cautela para salvaguardar el increíble progreso realizado en las semanas y meses venideros”, celebró el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, esta semana cuando anunció la serie de nuevas medidas sanitarias que a diferencia del resto de Europa no busca endurecer las normativas, sino relajarlas ante el éxito de la campaña de vacunación contra el Covid-19.
Este domingo los más de 34 mil habitantes de la colonia británica tenían permitido dar otro paso de regreso a la nueva normalidad, ya que desde la medianoche dejó de ser obligatorio el uso de mascarillas en el centro urbano, donde está ubicado la mayor parte del comercio y era la única zona que mantenía activado el protocolo. No obstante, el uso de cubrebocas en espacios públicos cerrados, como en el transporte, sigue siendo mandato.
La denominada por el gobierno “Operación Libertad” estableció desde el 1 de marzo una desescalada frente a la pandemia. El toque de queda que regía entre las 00 y las 6 de la mañana cesó durante la jornada del jueves y permitió que los restaurantes comenzaran a funcionar hasta las dos de la mañana. Las céntricas calles de Gibraltar han celebrado el alza de visitantes después meses de tensión.
De acuerdo a datos oficiales, el territorio de 6,7 kilómetros cuadrados, registra 4.273 contagios y 94 decesos por Covid-19 . Del total de casos positivos al virus solo 10 están activos, una cifra distante de los 1.317 casos del 8 de enero pasado.
La receta de los gibraltareños contra el Covid-19 está abocada a la inoculación de la población. Desde que el territorio del Peñón comenzó a vacunar en enero pasado con el fármaco desarrollado por Pfizer, a la fecha el 91,8% de los habitantes recibió al menos una dosis de la vacuna contra el virus, mientras que un 79% ya fue inmunizado con ambas dosis.
Después de cinco envíos de vacunas Pfizer y algunas de AstraZeneca desde Londres, el ministro de Sanidad de Reino Unido, Matt Hancock, celebró que la totalidad de la población adulta del territorio británico emplazado en la costa de España ya ha sido vacunada. Además, esperan que a finales de mes finalice la inoculación a todos los residentes mayores de 16 años.
El gobierno local informó que 27.662 residentes permanentes del territorio recibieron el tratamiento completo contra el coronavirus, lo que permitió lograr la anhelada inmunidad de rebaño. En tanto, entre la población “flotante” constituida por 15 mil trabajadores fronterizos incluidos 9 mil ciudadanos españoles, “2.371 recibieron ambas dosis” y “4.107, solo la primera”.
Todas las personas que reciben ambas dosis de la vacuna obtienen una tarjeta de identificación y sus datos son registrados en las plataformas del Ministerio de Salud, para en unos meses más desarrollar pasaportes sanitarios.
Según el diario El País, aún con los avances los ciudadanos se debaten entre la alegría y el respeto a las normativas sanitarias, especialmente por la amenaza de su cercanía con la frontera de España, donde la vacuna apenas alcanza a cubrir al 5,3% de su población.
Los ocho municipios españoles de la provincia de Cádiz son los vecinos más próximos al Peñón y mantienen activado el nivel de alerta 2 por la pandemia, con un toque de queda desde las 23 horas, uso obligatorio de mascarillas y restricciones de aforo.
Otra preocupación para Gibraltar es el efecto de la variante británica. Por esto, las autoridades mantienen controles “muy estrictos” en los vuelos provenientes de Reino Unido, con un examen negativo de PCR, certificado de residencia y prohibición de turistas, mientras que esta cepa fue detectada “en la mitad de los casos analizados entre diciembre de 2020 y febrero de 2021″.
El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, señaló que el siguiente paso para dejar atrás la pandemia será anular las restricciones sanitarias a la libertad de reunión, siempre que las personas sigan las recomendaciones y mantengan conductas “prudentes y seguras” frente al virus.
La Autoridad Sanitaria de Gibraltar (GHA) y Salud Pública de Gibraltar (PHG) mantienen cinco estudios activos sobre la situación epidemiológica, en lo que es considerado uno de los primeros experimentos para la normalidad post Covid-19.
El gobierno local espera un verano libre de coronavirus y el regreso del turismo después de más de un año de fronteras cerradas con controles sanitarios. Una de las primeras pruebas para Gibraltar será el martes cuando se realice el partido de clasificación al Mundial de Fútbol, uno de los primeros eventos masivos que tendrá un 50% del aforo y exigirá el certificado de vacunación.