Luego de que Bolivia decidiera cerrar sus fronteras para contener el contagio del COVID-19, el ministro de Relaciones Exteriores, Teodoro Ribera, anunció que los ciudadanos de ese país que se encuentran varados en Huara, en la Región de Tarapacá, podrán retornar a sus ciudades de origen.
Según información entregada por el canciller, podrán cruzar la frontera a las 5:00 horas de este sábado por el paso Colchane.
″La ministra boliviana Karen Longaric ha accedido a que a partir de mañana estas personas puedan ingresar a Bolivia, y acampar y quedarse en definitiva en la localidad de Pisiga. Queremos agradecer al Gobierno boliviano y a la canciller Longaric la disposición a recibir a sus conciudadanos", explicó Ribera.
Medios locales informaron que alrededor de 300 ciudadanos bolivianos se encontraban afectados por esta situación.
En medio de esta situación, el jefe de la defensa nacional en Tarapacá, general del Ejército Guillermo Paiva, criticó hace unos días la “indolencia” de la presidenta boliviana Jeanine Áñez y acusó a ese gobierno de “jugar con la esperanza” de sus compatriotas. Posteriormente el ministro Gonzalo Blumel había solicitado a las autoridades bolivianas a actuar con una perspectiva “humanitaria”.