El Departamento de Estado estadounidense dijo este martes que entregó al Congreso estadounidense notificación de “acciones” que tomará respecto a las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Cuando al portavoz del departamento, Ned Price, se le preguntó en una rueda de prensa en Washington si Estados Unidos retirará a las FARC de su lista de organizaciones terroristas, el vocero sólo respondió que hay procesos que requieren consultas y notificaciones y que esas consultas han empezado.

“Hemos iniciado el proceso de consultar con el Congreso en acciones que estamos tomando con respecto a las FARC,” dijo Price, quien agregó que tendrá más detalles sobre este tema en los próximos días.

La guerrilla más antigua de América Latina llegó a su fin en 2016, cuando los líderes de las FARC y representantes del gobierno del presidente Juan Manuel Santos suscribieron un acuerdo de paz en Bogotá.

Price dijo este martes en la rueda de prensa que Estados Unidos está enfocado en trabajar con el gobierno de Colombia para para apoyar el acuerdo de paz. El mes pasado el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken visitó Colombia.

“Obviamente la implementación de la preservación del acuerdo de paz fue un tema central de las discusiones,” dijo Price.

Colombia está en estos momentos celebrando el quinto aniversario de la firma del acuerdo de paz.

La Unión Europea excluyó a las FARC de su lista de organizaciones terroristas en 2017, poco después de que la desmovilizada guerrilla firmara el acuerdo de paz y entregara más de 8.000 armas.

Sin embargo, Estados Unidos ha mantenido a las FARC dentro de su lista advirtiendo sobre el peligro que representan los grupos disidentes, es decir, quienes no se acogieron al proceso de paz o lo abandonaron y luego siguieron delinquiendo siendo señalados de perpetrar actos terroristas.

En sus informes sobre terrorismo de 2019, el Departamento de Estado estadounidense señaló a las disidencias de las FARC como sospechosas de participar en un atentado con explosivos en el que murieron 10 policías que participaban en operativos de erradicación de plantas de coca. También señalaron como sospechosos al Ejército Nacional de Liberación (ELN), una guerrilla activa que hace parte de la lista de organizaciones terroristas desde 1997.