El gobierno de Perú presentó a última hora del miércoles ante el Congreso un proyecto de ley para la convocatoria de elecciones generales el 8 de octubre de 2023, tal y como había advertido la Presidenta peruana, Dina Boluarte, tras el nuevo intento fallido del Parlamento de acordar el anticipo electoral.
“Lamento que el Congreso no haya alcanzado el consenso necesario para adelantar las elecciones. Como anuncié en el último mensaje a la nación, presentaremos inmediatamente el proyecto de ley para que peruanos y peruanas puedan elegir democráticamente a sus autoridades en el 2023″, aseveró la mandataria peruana en un mensaje difundido por la Presidencia de Perú.
El proyecto de ley ya se encuentra en la mesa de partes del Congreso, según informó el primer ministro, Alberto Otárola.
“Hace unos momentos hemos ingresado en mesa de partes del Congreso un proyecto de ley que por mandato constitucional tiene el carácter de urgente y prioritario una iniciativa legislativa en la que estamos proponiendo el adelanto de elecciones generales para el año 2023″, expresó el premier a las afueras del Palacio de Gobierno.
La propuesta legislativa, aprobada en el Consejo de Ministros, dispone que la Presidenta de la República convoque elecciones generales para elegir al próximo jefe o jefa de Estado, así como a los congresistas, el 8 de octubre de 2023.
Además, la iniciativa incorpora cuatro disposiciones transitorias especiales como que el mandato de Boluarte concluya el 31 de diciembre de 2023 o que los congresistas culminarían su representación el 29 de diciembre de 2023.
La decisión del Ejecutivo peruano tiene lugar horas después de que el Congreso peruano haya rechazado el texto presentado por el presidente de la Comisión de Constitución, Hernando Guerra García, para adelantar las elecciones generales a 2023, tras lo que se ha suspendido la sesión y reprogramado para este jueves.
Perú está sumido en una profunda crisis política después de la destitución de Castillo, quien anunció el pasado 7 de diciembre la disolución del Parlamento y la instauración de un Gobierno de excepción.
Tras la detención del exmandatario, decenas de miles de personas han salido a protestar en diversos puntos del país para pedir la dimisión de Boluarte, la disolución del Congreso y la convocatoria urgente del elecciones presidenciales. Más de 60 personas han perdido la vida en los disturbios entre manifestantes y fuerzas de seguridad.