La mañana de este viernes, el regimiento Cacique Juan Maraza en Cochabamba, Bolivia, fue tomado por una multitud de adherentes al exmandatario Evo Morales.
Lo anterior, en respuesta al operativo desarrollado por el gobierno en Parotani para lograr desbloquear las carreteras, las que se encuentran tomadas hace 19 días por adherentes de Morales en protesta a la orden judicial en su contra por no presentar a declarar en un caso de abuso de menores y trata de blancas.
En un registro publicado por el medio Wara Tv, uno de los uniformados señala que “nos han cortado el agua, la luz y nos han tomado como rehenes”. Mientras tanto, algunos de las personas solicitan la salida del presidente Luis Arce.
“Lo único que pedimos es la pronta solución, no se intervenga los bloqueos de Parotani, todos los puntos de bloqueo, ya que la vida de mis instructores y de mis soldados están en peligro”, agregó según lo visto en el video.
Mientras tanto, en un comunicado, las Fuerzas Armadas de Bolivia señalaron respecto a la toma de rehenes en Cochabamba que “quien tomare las armas en contra de la patria se considera traición a la patria y alzamientos armados contra la seguridad y soberanía del estado, violando derechos fundamentales reconocidos en la constitución política del Estado, convenios y tratados internacionales”.
Luego, enfatizando en el uso de sus facultades legales para la defensa, señalaron que “se insta a deponer actitudes y abandonar las dependencias cuartelarías de manera inmediata y pacífica”.
Operativo de despeje de rutas
Este viernes, el gobierno de Bolivia desarrolló un megaoperativo en Parotani para lograr el desbloqueo de las carreteras tomadas por adherentes de Morales. Sobre esta acción, el ministro de Defensa de Bolivia, Edmundo Novillo señaló en su cuenta en X: “La paciencia y tolerancia tiene límites razón por la que el Estado y el Gobierno y la vida del pueblo que sufre por los bloqueos mediante sus instituciones se vieron en la obligación constitucional y legal de tomar acciones interinstitucionales garantizando la libre circulación, dejando los caminos expeditos y frenar estos graves daños a la economía para garantizar los derechos humanos a la salud”.
Ayer jueves, el presidente Luis Arce señaló que los bloqueos han generado pérdidas por más de 1.700 millones de dólares, mientras que 70 personas resultaron heridas, incluyendo 61 policías.
“Exigimos el levantamiento inmediato de todos los puntos de bloqueo para el restablecimiento de la normalidad en nuestro país”, dijo Arce en una declaración televisada. “De no escuchar este clamoroso pedido del pueblo boliviano, nuestro gobierno (...) ejercerá sus facultades constitucionales para precautelar el interés del pueblo boliviano”, sentenció.