"Hacemos un llamado a las autoridades, a escuchar la principal demanda del pueblo chileno, que aspira a un nuevo modelo de desarrollo y a la viabilización de una nueva constitución que se construya de forma democrática y participativa", declaró el Grupo de Puebla -una agrupación de líderes progresistas latinoamericanos que impulsó el excandidato presidencial, Marco Enríquez Ominami- tras su segundo encuentro este domingo.
El foro ratificó, mediante un comunicado, su "respaldo al legítimo reclamo del pueblo de Chile a protestar frente a las desigualdades y las injusticias", tras esta la reunión que fue se llevó a cabo en Buenos Aires y que fue inaugurada por el presidente electo de Argentina, Alberto Fernández.
Además, manifestaron su rechazo a la "violenta represión de la movilización por parte de las fuerzas policiales y las violaciones a los derechos humanos".
Entre los participantes que fueron convocados para el encuentro figuran los expresidentes Dilma Rousseff, Rafael Correa, Fernando Lugo, José Mujica, Ernesto Samper, Leonel Fernández y el exmandatario español José Luis Rodríguez Zapatero.
En el comunicado, asimismo, anunciaron que una tercera reunión tendrá lugar en Colombia, "durante los próximos seis meses".
Elecciones en Bolivia
Luego de que el Presidente de Bolivia, Evo Morales, convocara a nuevas elecciones presidenciales, tras el informe preliminar de la auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) indicando "presuntos hechos irregulares" de la primera vuelta presidencial del pasado 20 de octubre, el Grupo de Puebla apoyó la respuesta de Morales.
"Apoyamos la respuesta institucional adoptada por el Presidente de la República Plurinacional de Bolivia de convocatoria de nuevas elecciones con la conformación de un nuevo organismo electoral".
Con respecto, a los hechos de violencia que se han registrado los últimos días, la agrupación señaló que "repudiamos todo hecho de violencia física, de agresiones y de amedrentamientos como forma de presión política" e instó a respetar "los mandatos en curso de todas las autoridades legalmente constituidas" hasta el nuevo proceso electoral.
Colombia
Con respecto a la situación en Colombia, el Grupo de Puebla manifestó su apoyo "irrestricto al Acuerdo de Paz", y añadió que "somos partidarios de la implementación integral de todas sus previsiones dirigidas, tanto al desarme y la reincorporación de la insurgencia a la vida civil y política, como la remoción de las causas del conflicto en materia de tierras, sustitución de cultivos y profundización de la democracia, sobre las cuales no se ha avanzado significativamente", acusó.
Además, "afirmamos nuestra preocupación con el asesinato de más de 600 líderes sociales y 160 reincorporados desde la firma del acuerdo en noviembre 2016, lo que constituye una grave violación de los derechos humanos que amenaza el proceso de paz", sostuvieron en el documento.
Venezuela
"Promovemos un diálogo efectivo de Latinoamérica con Venezuela, en la búsqueda de una salida pacífica y democrática a la grave crisis política, económica y social por la que atraviesa esta nación hermana", se lee además en la declaración de la agrupación.
Agregando que "rechazamos la invocación al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), defendemos el legítimo derecho de autodeterminación de los pueblos y rechazamos la imposición de sanciones unilaterales".