Este martes se cumplen seis meses desde que el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, se autoproclamó como mandatario encargado durante una masiva manifestación en Caracas.
En entrevista con el diario El País el jefe del Parlamento asegura que hoy más que nunca existen las condiciones necesarias para sacar a Nicolás Maduro del poder: "Tenemos el reconocimiento creciente de la comunidad internacional. Europa incluso asoma sanciones. La más reciente votación del Europarlamento así lo refleja. Hemos visto cómo la comunidad venezolana se mantiene firme, en pie de lucha, movilizada, en expectativa, pensando en los planes de desarrollo del país. Cuando decimos 'el momento es ahora' es porque vemos a un régimen más aislado, más solo, disminuido, ahogado en contradicciones".
En ese sentido, el líder opositor aseguró que es necesario que los venezolanos continúen movilizándose y mantengan "una especie de resistencia, de aguante" a pesar de los intentos del Palacio de Miraflores para "generar desesperanza, miedo, que la gente se vaya del país".
Dicho descontento también afecta a las Fuerzas Armadas de Venezuela, según explicó Guaidó:"Un sargento gana 14 dólares o menos. Sus familias también se quieren ir, las FF.AA. tienen la tasa de deserción más alta. No por ser militares viven otra esfera".
Para el líder opositor el apoyo que les ha brindado el Grupo Internacional de Contacto, Grupo de Lima, a OEA, EE.UU. y Noruega ha sido parte de la presión contra el Ejecutivo chavista, pero explica que es necesario evaluar todas las opciones para definir cual será la "puerta de salida".
Una de las alternativas que se discutió entre los representantes de Maduro y del líder opositor -gracias a la mediación de Oslo- fue convocar a elecciones presidenciales, pero para Guaidó la opción de que el gobierno acepte convocar a comicios sigue siendo una "posibilidad", pero todavía no es segura. "Habrá que esperar los resultados", añadió.
El jefe del Parlamento venezolano también se refirió al lapidario informe de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, sobre la situación en Venezuela."Creo que se borra cualquier reduccionismo sobre que este es un problema de izquierda y derecha. Era muy cómodo reducir esto a un conflicto entre tendencias. No es así. Es un conflicto por el derecho a la vida, a elegir, por el derecho a la libertad de expresión, por el derecho a comer, a subsistir incluso", dijo.
Finalmente, el diputado opositor descartó que hayan solicitado recursos económicos a la Casa Blanca y aclaró que todavía no están seguros de aceptar el ofrecimiento del gobierno de EE.UU. "Veremos si es necesario o no y evaluaremos en su momento la pertinencia de esto".