El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, anunció este domingo que el ministro de Defensa, Oleksii Reznikov, será sustituido esta semana por Rustem Umerov, un legislador tártaro de Crimea.
“He decidido sustituir al ministro de Defensa de Ucrania. Oleksii Reznikov ha pasado por más de 550 días de guerra a gran escala. Creo que el ministerio necesita nuevos enfoques y otros formatos de interacción tanto con los militares como con la sociedad en general. Ahora Rustem Umerov dirigirá el ministerio”, manifestó Zelensky en su cuenta oficial de Telegram.
Umerov, de 41 años, miembro del partido opositor Holos, ha sido director del Fondo de Propiedad Estatal de Ucrania desde septiembre de 2022. Participó en el intercambio de prisioneros de guerra, presos políticos, niños y civiles, así como en la evacuación de civiles de territorios ocupados. También formó parte de la delegación ucraniana en las negociaciones con Rusia sobre el acuerdo de cereales respaldado por la ONU.
El anuncio se hizo luego de una oleada de ataques con drones rusos durante tres horas y media en contra de infraestructura portuaria en la región ucraniana de Odesa, según informaron funcionarios.
El ataque se produjo un día antes de la reunión programada entre el presidente ruso Vladímir Putin y su homólogo turco Recep Tayyip Erdogan, para discutir la reanudación de embarques de alimentos desde Ucrania bajo la Iniciativa de Granos del Mar Negro, de la que Moscú se salió en julio.
Las fuerzas rusas lanzaron 25 drones Shahed de fabricación iraní a lo largo del río Danubio a primeras horas del domingo, 22 de los cuales fueron derribados por las defensas antiaéreas, informó la fuerza aérea ucraniana en Telegram.
El jefe de despacho de Zelensky, Andriy Yermak, calificó el ataque como parte del intento de Rusia “de provocar una crisis alimentaria y hambruna en el mundo”.
El Ministerio de Defensa de Rusia señaló en un comunicado que el ataque estuvo dirigido contra instalaciones de depósito de combustibles utilizadas para abastecer equipo militar.
La esperada reunión entre Putin y Erdogan está programada para llevarse a cabo el lunes en Sochi, en la costa suroccidental de Rusia.
Funcionarios turcos han confirmado que ambos hablarán sobre renovar la iniciativa de cereales, de la cual el Kremlin se retiró hace seis semanas.
El acuerdo, negociado por la ONU y Turquía en julio de 2022, ha permitido que casi 33 millones de toneladas de granos y otros productos básicos salgan a salvo de tres puertos ucranianos a pesar de la guerra.
Sin embargo, Rusia se retiró del acuerdo después de asegurar que no se había cumplido un pacto paralelo que prometía el retiro de obstáculos para las exportaciones de alimentos y fertilizantes rusos.
Moscú se quejó de que las restricciones al transporte naval y a los seguros obstaculizaron el comercio de sus productos, a pesar de que ha despachado cantidades récord de trigo desde el año pasado.
La cumbre en Sochi se produce después de conversaciones entre los ministerios de Asuntos Exteriores de Rusia y Turquía el jueves pasado, durante las cuales Moscú entregó una lista de acciones que tendría que tomar Occidente a fin de que se reanuden las exportaciones ucranianas por el Mar Negro.
Erdogan se ha mostrado receptivo con la postura de Putin. En julio pasado dijo que Putin tenía “ciertas expectativas de los países de Occidente” sobre el acuerdo del Mar Negro y que era “fundamental que estos países tomaran medidas en ese sentido”.
Por otra parte, tres personas murieron el domingo en dos ataques con artillería rusa en la zona de Donetsk. Un hombre de 85 años figuraba entre las víctimas tras ser aplastado por los escombros de su propia casa, informó la fiscalía ucraniana.
Un hombre de 36 años también murió en otro ataque ruso en la región ucraniana de Jersón.
Los fiscales ucranianos también anunciaron el domingo que han abierto una investigación por crímenes de guerra por la muerte de un agente policial que murió por artillería rusa en el poblado de Seredyna-Buda la tarde del sábado.
Otros dos agentes de policía y un civil resultaron heridos en el ataque, el cual afectó a la región de Sumy, en el noreste de Ucrania.