El presidente Joe Biden ha mostrado una “mente muy abierta” en conversaciones con su hermano menor sobre los beneficios de los alucinógenos como una forma de tratamiento médico, aseguró este último en una entrevista radiofónica el miércoles.
Frank Biden hizo sus declaraciones durante una llamada a un programa radial The Michael Smerconish Program en Sirius XM. El presentador acababa de entrevistar a un reportero del Wall Street Journal, el cual escribió recientemente acerca de influyentes emprendedores y empleados de Silicon Valley que creen que el uso de alucinógenos y sustancias similares puede ayudar a lograr avances empresariales.
“Tiene una mente muy abierta”, comentó Frank Biden cuando Smerconish le preguntó sobre las conversaciones que ha sostenido con el mandatario al respecto. “Dejémoslo así. No quiero hablar; estoy hablando de hermano a hermano. Entre hermanos”.
“La pregunta es: ¿el mundo, Estados Unidos está preparado para esto? En mi opinión, estamos en la antesala de una consciencia que se tiene que generar para resolver muchos de los problemas de las adicciones y otros relacionados con ellas, pero igual de importante, para hacernos conscientes del hecho de que somos un solo pueblo y debemos unirnos”, declaró.
Frank Biden añadió que ha “investigado mucho” sobre el tema “porque soy un alcohólico en recuperación por muchos, muchos años”.
Algunos investigadores creen que la psilocibina, el componente de los hongos alucinógenos, cambia la manera en que el cerebro se organiza y puede ayudar a los usuarios a recuperarse de problemas como la depresión, el alcoholismo y el estrés postraumático. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó un fármaco que está relacionado con el anestésico ketamina para ayudar a la población a combatir la depresión difícil de curar.
Pero los expertos médicos advierten que se requiere de más investigación sobre la eficacia del fármaco y el alcance de los riesgos de los alucinógenos.
La Asociación Estadounidense de Psiquiatría no ha otorgado su respaldo al uso de alucinógenos en tratamientos, y ha hecho notar que la FDA aún no ofrece una determinación final. La FDA designó a la psilocibina como una “terapia innovadora” en 2018, etiqueta con la que se pretende acelerar el desarrollo y revisión de fármacos para combatir padecimientos graves. La MDMA, también conocida como éxtasis, cuenta con esa misma designación para el tratamiento contra el estrés postraumático.
Hace algunos meses Oregon se convirtió en el primer estado del país en legalizar el uso de la psilocibina entre adultos. El año pasado, los votantes de Colorado aprobaron despenalizar esa sustancia.
Estados de tendencia republicana, entre ellos Utah y Missouri, cuentan o han encargado estudios sobre la sustancia, en parte inspirados por veteranos que han recurrido a la psilocibina para lidiar con el estrés postraumático.
El republicano Rick Perry, exgobernador de Texas, habló la semana pasada en una conferencia en Colorado sobre ayudar a aprobar una iniciativa en el Congreso de Texas en 2021 para financiar un estudio sobre el uso de psilocibina para veteranos. Perry se expresó en contra del uso recreativo de la sustancia.