El huracán Iota provocó la muerte de al menos una persona y graves daños en la isla colombiana de Providencia (norte), azotada este lunes por el potente ciclón que alcanzó la categoría 5, la más alta
“Hay una afectación máxima (...), estamos hablando de un deterioro de cerca del 98% de la infraestructura de la isla”, informó el presidente Iván Duque en Twitter. Una persona fallecida está “por identificar”, dijo.
Providencia, donde habitan unas 6 mil personas, es el territorio colombiano más afectado por Iota en su paso por el Caribe rumbo a Centroamérica. Según autoridades, hay dificultades para comunicarse con los pobladores.
“Hemos tenido comunicación muy pobre por la afectación que hay en el sistema de telecomunicaciones” detalló el mandatario.
El hospital de la isla perdió parte de su techo y el archipiélago se encuentra sin servicio de electricidad, según el coronel John Fredy Sepúlveda, comandante de policía del archipiélago que agrupa a varios cayos y a las islas de San Andrés, Santa Catalina y Providencia.
Varios viajeros se encuentran atrapados en hoteles, informó.
Durante la mañana del lunes Iota llegó a estar a 38 kilómetros de Providencia, que se mantiene bajo alerta por la posibilidad de “vientos huracanados” y un oleaje con “alturas mayores a 3-4 metros”, según el más reciente boletín del estatal Instituto de Hidrológica, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM).
El instituto recomendó a los pobladores de la isla “extremar medidas” de precaución ante el paso del huracán Iota, que se dirige a una velocidad de 15 kilómetros por hora hacia Honduras y Nicaragua, áreas ya devastadas por el ciclón Eta hace dos semanas.
Además de suspender la actividad en playas, los organismos oficiales anunciaron el cierre del aeropuerto que sirve a Providencia y un toque de queda en la vecina isla de San Andrés, la más grande del archipiélago, hasta la madrugada del martes.
Colombia soporta una fuerte temporada de lluvias que deja al menos cinno muertos, 16 desaparecidos y miles de damnificados.
Iota continúa hacia Nicaragua y Honduras
El fenómeno avanzaba este martes por el norte de Nicaragua y se acercaba a Honduras aún con fuerza de huracán, aunque debilitado tras tocar tierra la víspera, descargando intensas lluvias y fuertes vientos en zonas de Centroamérica ya azotadas hace dos semanas por el ciclón Eta.
Más fuerte que su predecesor, Iota llegó a tierra como huracán de categoría 5 con vientos máximos de 260 km/h hora, dijo en un informe el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC), pero luego comenzó a perder fuerza.