Con la ayuda de México y Venezuela, especialistas y bomberos cubanos han buscado este domingo apagar el fuego de grandes proporciones que se originó en una base de almacenamiento de combustible en la provincia de Matanzas el viernes.
Hasta el momento, el Ministerio de Salud de Cuba ha informado que se registra una persona fallecida y otras 122 lesionadas.
El incidente se produjo la noche del viernes cuando un rayo impactó en un tanque de combustible que tenía un 50% de su capacidad de llenado -52.000 metros cúbicos- de crudo de producción nacional. Las llamas no pudieron ser contenidas y se extendieron la madrugada del sábado a otro de estos contenedores provocando explosiones.
Ubicada unos 100 kilómetros al este de La Habana, Matanzas tiene unos 140.000 habitantes. Este domingo el gobernador provincial, Mario Sabines, indicó que se habían evacuado 4.946 personas, sobre todo de una localidad colindante llamado Dubrocq.
“Hasta las 19.00 del 6 de agosto, fueron atendidas 121 personas, de ellas 36 están hospitalizadas en seis instituciones de salud del país y 85 recibieron el alta médica”, informó la cartera ministerial en un comunicado recogido por el periódico Cuba Debate.
De los 36 hospitalizados, cinco de ellos se encuentran críticos, tres graves, y el resto leves. Además, se identificó el fallecido como el bombero Juan Carlos Santana, de 60 años de la provincia de Cienfuegos.
Inicialmente las autoridades, incluyendo el presidente Miguel Díaz-Canel indicaron que había 17 bomberos desaparecidos. No se especificó cuántos hay actualmente.