Las fuerzas israelíes mataron este jueves al menos a 38 palestinos en bombardeos aéreos y terrestres en toda la Franja de Gaza y libraron combates cuerpo a cuerpo con militantes de Hamas en zonas de la ciudad meridional de Rafah, informaron autoridades sanitarias y medios de comunicación vinculados a la milicia islamista.

Estas nuevas muertes en el enclave palestino ocurren cuando desde Tel Aviv se ha indicado que Israel no cumplirá ninguna orden de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para detener la ofensiva contra la Franja de Gaza.

El portavoz del gobierno de Israel, Avi Hyman, manifestó en declaraciones difundidas por el canal de radiodifusión pública israelí KAN, que ”ningún poder en la tierra impedirá que Israel proteja a sus ciudadanos y persiga a Hamas en Gaza”.

Se espera que el tribunal con sede en La Haya se pronuncie este viernes sobre la solicitud de Sudáfrica de detener la ofensiva terrestre israelí en Rafah, al sur de la Franja de Gaza. Los expertos legales israelíes evalúan que existe una alta probabilidad de que la CIJ emita órdenes judiciales para frenar la guerra contra Gaza, dijo una fuente diplomática israelí al periódico Israel Hayom.

Tel Aviv lanzó una ofensiva terrestre el 6 de mayo en Rafah, donde más de 1,5 millones de palestinos se han refugiado de la guerra.

En los ataques de este jueves los tanques israelíes avanzaron en el sureste de Rafah, se acercaron al distrito occidental de Yibna y siguieron operando en tres suburbios orientales, según los residentes de esa zona del enclave palestino.

“La ocupación (las fuerzas israelíes) está intentando avanzar más hacia el oeste, están al borde de Yibna, que está densamente poblada. Todavía no la han invadido”, dijo a Reuters un residente, que pidió que no se revelara su nombre.

Palestinos se encuentran dentro de una casa destruida por un ataque israelí, en medio del conflicto en curso entre Israel y el grupo islamista palestino Hamas, en Rafah, al sur de la Franja de Gaza, el 22 de mayo de 2024. REUTERS/Hatem Khaled

“Oímos explosiones y vemos humo negro que sale de las zonas que ha invadido el ejército. Ha sido otra noche muy difícil”, agregó a través de una aplicación digital.

Los asaltos israelíes simultáneos en los bordes norte y sur de Gaza este mes han provocado un nuevo éxodo de cientos de miles de palestinos que huyen de sus hogares, y han cortado las principales rutas de acceso de la ayuda, aumentando el riesgo de hambruna.

Ataques “selectivos” contra Hamas

Israel afirma que no tiene más remedio que atacar Rafah para acabar con los últimos batallones de combatientes de Hamas que cree que se refugian allí.

“Hamas está en Rafah, Hamas ha estado reteniendo a nuestros rehenes en Rafah, por eso nuestras fuerzas están maniobrando en Rafah. Lo estamos haciendo de forma selectiva y precisa”, dijo este jueves en un comunicado el portavoz militar jefe israelí, contralmirante Daniel Hagari.

UNRWA, la principal agencia de Naciones Unidas en Gaza, calculaba hasta el lunes que más de 800.000 personas habían huido de Rafah desde que Israel comenzó a atacar la ciudad a principios de mayo, a pesar de las peticiones internacionales de contención.

Palestinos desplazados, que huyeron de sus casas debido a los ataques israelíes, se refugian en un campamento de tiendas de campaña en el área de Al-Mawasi en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, el 22 de mayo de 2024. REUTERS/Hatem Khaled

Suze van Meegan, responsable de Respuesta de Emergencia del Consejo Noruego para los Refugiados en Gaza, afirmó que muchos civiles seguían atrapados.

“La ciudad de Rafah se compone ahora de tres mundos completamente distintos: el este es una zona de guerra arquetípica, el centro es una ciudad fantasma y el oeste es una masa congestionada de personas que viven en condiciones deplorables”, dijo en un comunicado.