El gobierno británico confirmó el viernes que pondrá en marcha la siguiente fase de su plan de desconfinamiento pese a brotes preocupantes de la cepa india del coronavirus en Inglaterra que podrían suponer un “grave trastorno” para el calendario en el futuro.

“Procederemos con nuestro plan de pasar al tercer escalón en Inglaterra a partir del lunes”, anunció el primer ministro Boris Johnson en rueda de prensa.

“Pero tengo que ser sincero con ustedes en que la variante india podría suponer un grave trastorno para nuestro progreso y podría dificultar el paso a la fase 4 en junio”, advirtió.

El número de casos en el Reino Unido de la variante B1.617.2, inicialmente detectada en India, pasó de 520 la semana pasada a 1.313 esta semana, según el ministerio de Sanidad.

La mayoría se encuentra en el noroeste de Inglaterra, en torno a las ciudades de Bolton y Blackburn -unas de las zonas más desfavorecidas del país-, y algunos en Londres.

“Por el momento, no hay muestras de que el aumento de casos se traduzca en presiones inmanejables en el servicio de sanidad pública, incluso en Bolton, y las infecciones, muertes y hospitalizaciones a nivel nacional se mantienen en sus niveles más bajos desde el verano pasado”, subrayó el primer ministro justificando su decisión de seguir adelante con el desconfinamiento.

Para atajar el avance de la nueva variante, se pusieron en marcha medidas a nivel local que incluyen una campaña de detección intensiva y la secuenciación del genoma de los casos positivos.

Además, el Ejecutivo decidió acortar de 12 a 8 semanas el intervalo entre las dos dosis de la vacuna para las personas de más de 50 años o vulnerables por motivos de salud, anunció Johnson.

El lunes marca una importante etapa en el desconfinamiento en Inglaterra, con la reapertura de salas de bares y restaurantes, así como museos, cines, teatros y hoteles.

Familiares y amigos podrán volverse a reunir en lugares cerrados, por primera vez desde noviembre.

Andy Burnham, alcalde del Gran Mánchester, que se encuentra en la zona más afectada, afirmó el viernes su oposición a medidas locales de confinamiento como las aplicadas en otoño en Inglaterra.

Según su hoja de ruta, el gobierno de Johnson esperaba poder levantar el 21 de junio las restricciones restantes, principalmente a la vida nocturna y los grandes eventos.

Por otro lado, la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, decidió suspender las medidas de desconfinamiento que comenzarían a ser aplicadas en Glasgow a partir del lunes debido al aumento de casos de Covid-19 con la variante india.

Alemania anunció que volvía a clasificar al Reino Unido como país de riesgo ante esta situación epidemiológica.