El primer ministro iraquí, Haidar al Abadí, ha levantado el toque de queda impuesto al tráfico rodado y ha reabierto el espacio aéreo y los puestos fronterizos terrestres, medidas que habían sido impuestas para evitar eventuales ataques durante la jornada electoral que se celebra hoy.
En un comunicado, el primer ministro otorgó a los mandos locales de las fuerzas de seguridad la capacidad de imponer un bloqueo parcial en zonas donde pudieran existir riesgos de seguridad.
Al menos seis personas murieron hoy, dos de ellas supuestos terroristas, en enfrentamientos y atentados en varias provincias de Irak, coincidiendo con la celebración de las elecciones legislativas en el país, que han sido amenazadas por el grupo terroristas Estado Islámico.
Varios agentes abortaron un ataque contra un centro electoral en una zona cerca de Yarf al Malh, en el noreste de Diyala, y mataron a dos terroristas del EI que llevaban adosados al cuerpo cinturones explosivos, según una fuente de la Policía.
Cuatro miembros de la milicia progubernamental Multitud Popular perecieron y otros tres resultaron heridos por la explosión de una bomba al paso de una patrulla de la milicia, que formaba parte del dispositivo para asegurar los comicios en la provincia de Saladino.
Hoy se celebran en Irak las primeras elecciones parlamentarias tras la derrota del EI, en las que unos 24 millones de iraquíes están llamados a renovar a los 329 diputados del Parlamento, cuya principal misión será la reconstrucción del país.