El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Abbas Araqchi, afirmó este miércoles que la región está al borde de una catástrofe a gran escala debido a la escalada de tensiones entre Israel y Hamas y advirtió de que Teherán no permanecería indiferente en caso de guerra en Líbano.
En declaraciones a la prensa al margen de la Asamblea General de la ONU, Araqchi afirmó que Israel ha cruzado “todas las líneas rojas” y que el Consejo de Seguridad de la ONU debe intervenir para restablecer la paz y la estabilidad.
Previamente el Presidente iraní, Masoud Pezeshkian, había señalado que Israel quiere arrastrar al Medio Oriente a una guerra total provocando a Irán para unirse al conflicto de casi un año entre Israel y Hezbollá respaldado por Teherán en el Líbano.
Pezeshkian, quien asistió a la Asamblea General de las Naciones Unidas, expresó que “no deseamos ser la causa de la inestabilidad en el Medio Oriente, ya que sus consecuencias serían irreversibles”.
“Queremos vivir en paz, no queremos guerra”, agregó, señalando que “es Israel quien busca crear este conflicto generalizado”.
El gobernante iraní también acusó a la comunidad internacional de permanecer en silencio ante lo que llamó “genocidio de Israel” en Gaza.
El llamado de Pezeshkian para resolver el conflicto de Medio Oriente a través del diálogo se produjo después de que Israel desatara una intensa ola de ataques aéreos contra Hezbollá el lunes, convirtiéndolo en el día más mortal en Líbano en casi un año de conflicto entre Israel y el grupo respaldado por Teherán.
“Defenderemos a cualquier grupo que esté defendiendo sus derechos y a sí mismo”, dijo Pezeshkian, cuando se le preguntó si Irán entrará en el conflicto entre Israel y Hezbollá.