El Ejército israelí ha ordenado a última hora de este sábado la evacuación forzada de más partes de la ciudad de Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, tan solo tres días después de que anunciase lo propio para acabar con los milicianos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) presentes en la zona.
La orden, publicada por el portavoz en árabe de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el coronel Avichay Adraee, afecta a los residentes del centro de la ciudad gazatí, en particular de los barrios Sheikh Nasser, Barbakh y Ma’an en los bloques 53, 54, 55, 103, 104, según ha dicho en la red social X.
Como viene siendo habitual, Adraee ha justificado esta decisión porque desde estos lugares, “Hamas y las organizaciones terroristas continúan disparando cohetes hacia el Estado de Israel”. Las FDI, ha asegurado, “actuarán enérgicamente contra estos elementos”.
Así, el Ejército ha ordenado a la población palestina que se dirija “inmediatamente” a la “zona humanitaria segura” que ha habilitado en la costa suroeste del enclave.
Según datos de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), cerca de dos millones de palestinos, esto es, nueve de cada diez personas de la Franja de Gaza, ha sufrido el desplazamiento forzoso al menos una vez desde el inicio de la ofensiva militar israelí el 8 de octubre.
Naciones Unidas y ONG internacionales recuerdan que estas maniobras de desplazamiento forzado son ilegales mientras que las autoridades de Gaza, bajo control de Hamas, así como asociaciones humanitarias, han acusado a Israel de atacar en varias ocasiones estas “zonas seguras”.
El Ejército israelí lanzó una ofensiva contra Gaza hace más de diez meses, a raíz de los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamas y otras facciones palestinas, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados. Las autoridades de Gaza han denunciado ya cerca de 39.800 muertos y 91.702 heridos.