Italia permite a barco de ONG desembarcar a 415 migrantes en Sicilia

Foto: AFP

Más de 13.350 personas han llegado a las costas italianas desde enero de este año, tres veces más respecto al mismo periodo de 2020, de acuerdo con el Ministerio del Interior italiano.


El buque humanitario “Sea-Eye 4” fue autorizado por Roma a desembarcar en el puerto siciliano de Pozzallo a 415 migrantes rescatados en el Mediterráneo, informó este jueves la ONG Sea Eye.

Este barco-hospital de la ONG alemana se encontraba frente a las costas de Palermo -en el noroeste de la isla sureña-, cuando las autoridades italianas le informaron el miércoles de tarde que podía atracar en Pozzallo, ubicado en el sureste de Sicilia.

Luego de que se le haya negado acceder a un puerto maltés, la ONG acogió con gran satisfacción la decisión italiana, aunque lamentó tener que volver al mar para navegar hasta Pozzallo.

“¡'Sea-Eye 4′ finalmente encontró refugio seguro en paz! ¿Pero, por qué Pozzallo? ¿Cómo se les ha ocurrido la idea de enviar a un barco de salvamento con centenares de personas exhaustas, entre ellas 150 niños, a un viaje vía marítima de dos días, cuando ya se encontraba frente a un puerto seguro?”, reaccionó en Twitter.

Se trata de la primera misión del “Sea-Eye 4”, que dejó el astillero de Rostock (norte de Alemania) a mediados de abril para dirigirse al Mediterráneo.

Italia es uno de los principales puntos de entrada a Europa de migrantes desde el norte de África, sobre todo de Túnez y Libia, donde las salidas son mucho más numerosas respecto a años anteriores.

Más de 13.350 personas han llegado a las costas italianas desde enero de este año, tres veces más respecto al mismo periodo de 2020, de acuerdo con el Ministerio del Interior.

La mayor parte de las embarcaciones improvisadas en que los migrantes navegan hacia Italia zarpan desde Libia y Túnez.

La ministra del Interior italiana, Luciana Lamorgese, y la comisaria del Interior europea, Ylva Johansson, viajaron a Túnez este jueves para ofrecer ayuda económica a cambio de un mayor esfuerzo del país magrebí para evitar la salida de migrantes hacia Europa desde sus costas.

Al menos 685 migrantes han muerto en el Mediterráneo desde el 1 de enero de 2021, la gran mayoría en esta ruta central considerada la más mortífera del mundo, de acuerdo con la ONU.

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