Luego de la sorpresiva renuncia de la embajadora de Estados Unidos ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, la prensa estadounidense comenzó a especular no solo los motivos que la llevaron a dejar el cargo sino que además, comenzaron las apuestas para saber quién sería el sucesor de la ex gobernadora de Carolina del Sur.
Ivanka Trump, la hija mayor del presidente Donald Trump y asesora de la Casa Blanca, fue el nombre que primero sonó en los medios de comunicación y aprovechando la incertidumbre el mandatario fue consultado rápidamente sobre ello. "No tiene nada que ver con nepotismo, pero la gente que conoce a Ivanka sabe que sería dinamita", respondió cuando fue consultado antes de abordar un avión hacia Iowa.
"Sería acusado de nepotismo. Pero yo creo que Ivanka sería increíble", agregó.
La empresaria incluso publicó en su cuenta de Twitter una fotografía junto a Haley y su esposo, Jared Kushner, en la Casa Blanca el mismo día que la entonces embajadora de Washington dada a conocer a los medios la noticia de su salida.
https://twitter.com/IvankaTrump/status/1049684207923023873
De acuerdo a la cadena Fox News hay otro cuatro nombres que podrían representar al gobierno de Trump ante el organismo internacional, está por ejemplo, se trata del embajador de EE.UU. en Alemania, Richard Grenell, quien ya se desempeñó en el cargo durante las administración de George W. Bush. Entre los puntos a favor que tiene está el hecho que tiene una relación cercana con el Consejero de Seguridad Nacional, John Bolton.
El medio además dice que el representante de Washington en Moscú, Jon Hunstan sería un fuerte candidato para llegar a las oficinas de Nueva York.
Además habrían otras dos candidatas: la vocera del Departamento de Estado y subsecretaria de Estado para la diplomacia y asuntos externos, Heather Nauert y la ex asesora de adjunta de Seguridad Nacional, Dina Powell podrían ser candidatas de Trump.
Se espera que el mandatario de a conocer a su nominado para suceder a Haley entre dos a tres semanas más. Una vez conocida esa persona será el turno del Senado de confirmar si la acepta o no en el cargo.