Estados Unidos tendrá suficientes vacunas contra el Covid-19 para finales del tercer trimestre del año, a fin de inocular a 300 millones de estadounidenses, anunció el presidente Joe Biden.

“Eso es apenas el comienzo”, dijo Biden el jueves. “Nuestro objetivo final es derrotar al Covid-19”. Con el ritmo actual de inoculación, Estados Unidos se encamina a superar la meta de Biden de aplicar 100 millones de dosis de vacunas en sus primeros 100 días de gobierno, con más de 26 millones de inyecciones en sus primeras tres semanas en la Casa Blanca.

El mandatario hizo el anuncio en el enorme complejo de los Institutos Nacionales de Salud, en las afueras de Washington, durante una visita a algunos de los principales científicos de la nación en el frente de lucha contra esta enfermedad. Recorrió el Laboratorio de Patogénesis Viral que creó la vacuna contra el coronavirus fabricada ahora por Moderna y aplicada en Estados Unidos, así como en otros países.

Biden anunció que Estados Unidos aseguró compromisos contractuales con Moderna y Pfizer para que entreguen 600 millones de dosis de inoculaciones para finales de julio, más de un mes antes de lo previsto inicialmente. “Nos encaminamos a tener un suministro suficiente para 300 millones de estadounidenses para finales de julio”, afirmó el mandatario.

El ritmo de las inyecciones podría incrementarse si una tercera vacuna contra el coronavirus, la del fabricante Johnson & Johnson, es aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés).

Acompañado por el doctor Anthony Fauci, el principal especialista en enfermedades infecciosas de la nación, Biden enfatizó que su gobierno está haciendo todo lo posible para incrementar el suministro de vacunas y la capacidad para aplicarlas en el país.

“Ha sido un proceso de aprendizaje muy difícil”, declaró Biden.

El presidente, que llevaba mascarilla, aprovechó sus declaraciones para censurar al presidente Donald Trump, diciendo que no heredó ningún plan para vacunar a la mayor parte del país”.

No es un secreto que el programa de inoculación se encontraba en mucho peor forma que lo que mi equipo y yo habíamos anticipado”, agregó.

A la fecha, el gobierno de Biden ha desplegado soldados para que colaboren en la instalación de centros de vacunación multitudinaria en varios estados, a fin de tener capacidad para incrementar el ritmo de inoculación una vez que haya más suministros disponibles.

El Laboratorio de Patogénesis Viral es encabezado por el doctor Barney Graham, cuyo equipo hizo descubrimientos cruciales hace años que sentaron las bases para el veloz desarrollo de esa y otras vacunas contra el coronavirus. Antes del surgimiento de la pandemia, una colega de investigación de Graham, la doctora Kizzmekia Corbett, había estado utilizando esos hallazgos previos para desarrollar una vacuna contra el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS por sus siglas en inglés), primo del COVID-19.