Este lunes el presidente electo, Joe Biden, recibió la primera dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech en un evento televisado desde el Hospital ChristianaCare en Newark (Delaware).
“Hago esto para demostrar a la gente que debe prepararse cuando este disponible la vacuna. No hay nada de que preocuparse”, indicó el candidato ganador de las elecciones presidenciales.
El exvicepresidente estuvo acompañado de su esposa, Jill Biden, quien también debía ser inoculada según adelantó la semana pasada en equipo del demócrata.
El viernes pasado también se adelantó la vicepresidenta electa, Kamala Harris, recibirá una dosis durante esa misma semana.
El líder demócrata había señalado días antes que tenía intensiones de recibir una dosis de la vacuna pero no quería “adelantarse”, ya que, el proceso en Estados Unidos había comenzado para los funcionarios de la salud el día lunes.
“No quiero adelantarme, pero quiero asegurarme de demostrarle al pueblo estadounidense que es seguro tomarla”, indicó.
La primera estadounidense fue Sandra Lindsay, una enfermera de la unidad de cuidados intensivos del Long Island Jewish Medical Center en Nueva York, cuyo proceso fue televisado.
La campaña de vacunación en Estados Unidos comenzó con unas 3 millones de dosis e inició la misma jornada que el país superó los 300 mil decesos producto del Covid-19.
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se convirtió en el primer miembro de la Casa Blanca en vacunarse contra el coronavirus y lo hizo de manera pública.
“Tuve el honor de dar un paso adelante y recibir la vacuna segura y eficaz contra el coronavirus y esperamos que sea una fuente de confianza y consuelo para el pueblo estadounidense”, indicó Pence.
La inoculación fue en el salón Eisenhower de la Casa Blanca y también estuvieron presentes la segunda dama, Karen Pence, y el doctor Jerome Adams, el Cirujano General de EE.UU. o el principal encargado de la salud pública de ese país.
