Una juez británica rechazó este martes levantar la orden de detención contra Julian Assange por haber violado los términos de su libertad condicional cuando se refugió en la embajada ecuatoriana hace más de 5 años.
"No estoy convencida de que haya que retirar la orden", dijo la juez Emma Arbuthnot, acabando con la posibilidad de que el fundador de Wikileaks pudiera salir libremente a la calle.
Assange buscó refugio en la embajada huyendo de una orden de arresto europea porque Suecia le reclamaba como sospechoso de unos delitos sexuales.
La justicia sueca abandonó la investigación, pero la policía británica quiere aún detenerlo por haber vulnerado los términos de su libertad condicional.
Assange teme dejar la embajada, ser detenido y acabar extraditado a Estados Unidos por haber difundido miles de secretos oficiales de este país.
El lunes se abrió una puerta al caso del fundador de Wikileaks cuando la Alta Corte de justicia bloqueó la extradición a Estados Unidos del presunto hacker Lauri Love, que le reclamaba por haber penetrado en los sistemas informáticos de la NASA y el Pentágono, entre otras organizaciones.
En una audiencia la semana pasada, el abogado del fundador de Wikileaks, Mark Summers, sostuvo que la orden de detención "perdió su propósito y función" después de que la justicia sueca abandonase su investigación.
Summers estimó que Assange, de 46 años, ha estado viviendo en condiciones "similares al encarcelamiento" y que su "salud psicológica se ha deteriorado" y "está en peligro". Sin embargo, el fiscal Aaron Watkins consideró "absurda" la demanda.