La fiscalía de Agrigento, en Sicilia, ha rechazado firmar el decreto de expulsión para la capitana del barco de la ONG alemana Sea Watch, Carola Rackete, emitido por la delegación de Gobierno, como pretendía el ministro del Interior, Matteo Salvini, después de que la joven quedara en libertad.
La portavoz de la ONG en Italia, Giorgia Linardi, confirmó en una rueda de prensa la decisión de la fiscalía que momentáneamente no se ocupará del decreto de expulsión al menos hasta el 9 de julio, cuando la comandante del Sea Watch 3 se presente a declarar en el marco de la investigación abierta por el delito de favorecer la inmigración.
La jueza de Agrigento, Alessandra Vella, dejó este martes en libertad a la capitana al no convalidar la detención del pasado sábado por arribar sin permiso al puerto italiano de Lampedusa (sur) con el objetivo de hacer desembarcar a los 40 migrantes que transportaba a bordo.
Linardi confirmó que Rackete ha sido trasladada a un "lugar seguro" para protegerla de la atención mediática, pero no habló de "amenazas", y añadió que se encuentra aún en Italia, pero que no garantiza que siga en el país en las próximas horas, ya que "es una mujer libre".
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"Carola tiene que tomarse su tiempo después de cuatro días de aislamiento. Entender todo lo que ha pasado y además afrontar dos investigaciones", añadió Linardi.
La portavoz del Sea Wacth explicó que tras su liberación, la comandante bromeó al decir que será mejor que vuelva a Australia a ocuparse del seguimiento de los albatros y sobre todo se interesó por sus pasajeros.
Tras su arresto, señaló Linardi, Rackete se preocupaba en todo momento por saber si los migrantes habían podido desembarcar.
Con el fallo de este martes, la jueza de investigación preliminar de Agrigento provocó la ira de Salvini que acuso a una parte de la magistratura de "hacer política" y calificó la decisión de "vergüenza".
"Ha violado las leyes, ha puesto en peligro la vida de algunos militares y ahora es libre. Vuélvete a Alemania a causar problemas allí y a poner en peligro la vida de quien defiende el país", agregó Salvini.
Los representantes de Sea Watch y de otras ONG de salvamento en el mar como Open Arms o Mediterránea y organismos como Médicos sin Fronteras comparecieron hoy en la sede de la prensa extranjera de Roma después de rechazar participar en una comparecería ante una comisión del Parlamento italiano, tras constatar que no se había invitado a la ONG de la capitana Rackete.
Durante la rueda de prensa, las ONG defendieron que la capitana actuó según las leyes del mar.
Mediterránea confirmó que en caso de que se encuentren en la misma situación del Sea Watch 3 "actuarán como prevé la normativa de las leyes internacionales del mar" y que supone poner a salvo las personas a bordo.
