Se suponía que Joe Biden reafirmaría anoche su favoritismo, en el segundo debate de los precandidatos demócratas que buscan la nominación presidencial del partido. Pero ocurrió todo lo contrario: el Vicepresidente de la era Obama fue puesto contra las cuerdas y salió muy mal parado. Pero quien le complicó el panorama a Biden, de 76 años, no fue Bernie Sanders (77), el otro peso pesado del Partido Demócrata, sino que Kamala Harris, de 54 años y que engloba parte importante de las características de la generación post Obama: es negra -hija de padre jamaicano y madre india, serena e implacable, y del ala más de izquierda de la oposición estadounidense. ¿Qué ocurrió?

En pleno debate, cuando todos los ojos estaban puestos en Biden y Sanders, que quedaron juntos en el escenario, Kamala Harris arremetió de manera completamente inesperada. Entonces, la senadora californiana lanzó una munición que dejó casi sin reacción al ex Vicepresidente, quien intentaba en vano demostrar que él es la mejor carta para enfrentar a Donald Trump en las presidenciales de noviembre de 2020. "No creo que usted sea un racista, pero eso fue hiriente", señaló Harris, al interpelar a Biden, quien recientemente presumió de su buena relación con legisladores segregacionistas. Acto seguido, criticó a Biden por haberse opuesto, en los años 70, al programa busing, un plan de transporte y distribución de niñas por escuela para combatir la segregación racial.

[caption id="attachment_719901" align="alignnone" width="600"]

El ex Vicepresidente Joe Biden, el senador y ex precandidato demócrata Bernie Sanders y la senadora californiana Kamala Harris, la noche del jueves durante el debate de los abanderados presidenciales del Partido Demócrata. Foto: AFP[/caption]

"Había una niña en California, de segunda clase, a la que llevaban en esos programas. Esa niña era yo", lanzó Kamala Harris. "Lo que usted dice es una distorsión de la realidad", respondió Biden. "Yo no me opuse a ese programa, sino que lo ordenara el Departamento de Educación", intentó explicar el ex Vicepresidente. Pero a esa altura, Kamala Harris -que junto a Sanders y Elizabeth Warren forman parte del ala progresista del Partido Demócrata- le había propinado casi que un golpe de nocaut a su rival. Poco después, en la cuenta de Twitter de la candidata apareció una fotografía de su infancia.

[caption id="attachment_719867" align="alignnone" width="600"]

Imagen de infancia de Kamala Harris que subió a su cuenta de Twitter. Foto: Reuters[/caption]

Diarios como The New York Times y The Washington Post destacaron por la mañana la arrolladora performance que consiguió Harris. Además, la discusión entre Biden y Harris invisibilizó a Sanders, quien quedó literalmente al medio de ambos.

"La gente subestima a Harris como política, hasta el día de hoy. Ella aprovechó el momento en su primer debate presidencial, trazando un curso audaz. Cuando los candidatos hablaron repetidamente, ella levantó los brazos y los calló: 'Oigan, muchachos, ¿saben qué? Estados Unidos no quiere presenciar una pelea de comida, quiere saber cómo vamos a poner comida en su mesa'. Funcionó", afirmó Aaron Blake, columnista de The Washington Post, que dio por ganadora a la senadora. "Y ahora, el sueño de una fórmula presidencial Harris-Buttigieg", escribió Frank Bruni en The New York Times.

Ocurre que la figura de Pete Buttigieg, de 37 años, ex veterano de Afganistán y sindicado como un precandidato milenial, también va al alza. El alcalde de South Bend, Indiana, es el primer postulamente abiertamente gay a la Casa Blanca. Otro de los ataques que sufrió Biden provino del joven congresista Eric Swalwell, que remarcó los 76 años del ex Vicepresidente de Obama. Swalwell dijo que hace ya 32 años el propio Biden pidió "dar el relevo a una nueva generación de demócratas". La imagen de Biden, del ala moderada del partido, contrasta precisamente con el perfil de Harris, Buttigieg y Swalwell. Pero aunque se trata de solo el primer debate, Kamala fue quien dio el primer golpe.

En Estados Unidos algunos estiman que Kamala Harris es la "versión femenina" de Barack Obama. Pero esta política, que en 2017 se convirtió en la segunda senadora afroamericana en la historia del país, tiene currículum y cualidades de sobra para cultiva su propio perfil y propuestas. Si hay una figura que represente a la nueva generación de dirigentes del Partido Demócrata esta es precisamente Harris.

En enero pasado, la senadora dio otro golpe de efecto cuando anunció su campaña en el programa Good Morning America, de la cadena ABC y uno de los más vistos del país, justo cuando Estados Unidos conmemora un feriado por el natalicio de Martin Luther King. Días después, la precandidata viajó a Carolina del Sur, un estado donde Trump se impuso en 2016, pero que tiene una importante población afroamericana, para oficializar su candidatura.Harris es una fiel representante del "sueño americano" y de los cambios demográficos que ha vivido el país: creció en Oakland y fue fiscal general de California. "Kamala Harris, para la gente", es el slogan de su campaña. Y no es casual. 

[caption id="attachment_719870" align="alignnone" width="600"]

Kamala Harris después de su participación en el segundo debate demócrata, la noche del jueves en Miami. Foto: AFP[/caption]