Kate, princesa de Gales, fue ovacionada el domingo en Wimbledon, donde presenció la final individual masculina, en su segunda aparición pública este año mientras se somete a una quimioterapia preventiva contra el cáncer.
Kate Middleton, aficionada al tenis y patrona del All England Lawn Tennis and Croquet Club de Wimbledon, llevaba un vestido morado brillante cuando entró en el recinto con su hija, la princesa Carlota, antes del partido en el que Carlos Alcaraz retuvo su corona al vencer en sets corridos a Novak Djokovic.
Al llegar al palco real de la Pista Central, Kate saludó con la mano a los espectadores, algunos con banderas británicas, que se levantaron para aplaudir su ingreso. Luego entregó el trofeo de campeón a Alcaraz y el de finalista de Djokovic.
La princesa de Gales, de 42 años y esposa del príncipe heredero William, fue sometida en enero a una operación abdominal que reveló la presencia de un cáncer. Desde entonces está en tratamiento.
Regresó a la vida pública en junio, en el desfile militar “Trooping the Colour”, con motivo del cumpleaños oficial del rey Carlos, y dijo que esperaba asistir a otros actos durante el verano boreal.
Su oficina, el palacio de Kensington, se ha negado a dar detalles específicos sobre el tipo de cáncer o su condición médica, aparte de decir que el tratamiento había comenzado en febrero.
Carlos, de 75 años, también se ha sometido a un tratamiento contra el cáncer. Volvió a sus funciones públicas en abril, y ha permanecido ocupado, aunque sus compromisos diarios se están limitando para minimizar los riesgos para su recuperación.