La candidata Keiko Fujimori, heredera de una dinastía política conservadora, acusó el sábado a la “izquierda internacional” de presionar en favor del socialista Pedro Castillo, que lidera con un estrecho margen los comicios presidenciales de Perú.
Fujimori, hija mayor del encarcelado exmandatario Alberto Fujimori, dijo que la polarizada reciente elección el país se ha convertido en el “epicentro” de Latinoamérica en una lucha entre la democracia y el comunismo que representa su rival.
“Perú es un país estratégicamente, geopolíticamente hablando, fundamental en Latinoamérica y es por eso este intento de la izquierda internacional”, afirmó la candidata en una conferencia con la prensa extranjera.
“En Bolivia y en la Argentina la izquierda regresó, en Ecuador un ilustre empresario logró ganar las elecciones presidenciales y hoy el Perú está en esta batalla”, refirió.
La candidata, que ha postulado dos veces sin éxito a una elección presidencial, está a punto de perder la contienda frente al hijo de campesinos y dirigente de izquierda Castillo, que tiene el 50,15% de los votos, cuando van el 99,89% de la actas contabilizadas, según la oficina electoral.
Fujimori ha acusado de presuntas irregularidades en las mesas de votación y ha solicitado al organismo electoral la nulidad de 887 actas electorales, fuera del plazo establecido, lo que ha sido rechazado por las autoridades.
La postulante de derecha dijo que está apelando esta decisión para insistir en la revisión de las actas por supuestas suplantaciones de identidades de votantes y fallas procesales.
El partido Perú Libre de Castillo ha rechazado la acusación, mientras que el jurado electoral y observadores internacionales han manifestado que las elecciones han sido transparentes.
La candidata manifestó que el partido político de su rival, cuyo líder es el médico cirujano Vladimir Cerrón formado en Cuba, se ha autodenominado un grupo marxista-leninista.
Si bien Perú Libre postuló a Castillo, el candidato socialista ha marcado distancias con la agrupación y ha dicho que Cerrón no tendrá ningún cargo en su eventual Gobierno.
“El Perú es un nuevo epicentro de confrontación entre el comunismo y una economía libre, entre la izquierda y la centro derecha, entre lo que se dice el estatismo y el mercado abierto”, dijo Fujimori, de 46 años.
Varios líderes de la izquierda de América Latina, como el presidente argentino Alberto Fernández, el boliviano Luis Arce y el nicaragüense Daniel Ortega, han felicitado el “triunfo” de Castillo, algo que ha enojado al Gobierno, que ha pedido a la comunidad internacional esperar los resultados finales.
En medio de la tensión a la espera del resultado, hace unos días un fiscal pidió la prisión preventiva para Fujimori por “incumplimiento” de restricciones en un caso de lavado de activos por supuestos aportes ilegales de la firma brasileña Odebrecht y otras empresas locales durante anteriores campañas presidenciales del 2011 y del 2016.
La candidata ha estado ya en prisión preventiva por el caso. La primera vez entre octubre del 2018 y noviembre del 2019 y la última entre enero y mayo del año pasado.